Michael McCaul, legislador republicano del Congreso de EU, negó que los agentes de la Oficina para el Control de Alcohol, Tabaco y Armas (ATF) que dejaron pasar armas hacia México como parte del operativo “Rápido y Furioso” tengan algún tipo de nexo con los cárteles mexicanos de la droga.
“Vamos a realizar audiencias sobre esta fallida operación (“Rápido y Furioso”). Pero quiero que quede claro que los agentes de ATF no operaron en contubernio con los carteles de la droga”, aseguró McCaul.
Según McCaul, que preside un subcomité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, el objetivo de la polémica operación “Rápido y Furioso” era rastrear esas armas y detener a los traficantes.
“Es muy preocupante que muchas de estas armas hayan ido a parar a manos de los carteles de la droga, y por eso estamos pidiendo una investigación y estamos preparando audiencias. Tenemos que incrementar los esfuerzos para combatir el flujo de armas a México”, agregó el legislador.
McCaul consideró que aún si Estados Unidos incrementa los esfuerzos para frenar el contrabando de armas a México, “los criminales siempre encontrarán la forma de conseguirlas”.
Con información de EFE