El papa Benedicto XVI hizo una amplia exoneración del pueblo judío en la muerte de Jesucristo en un nuevo libro, en el que desarrolla una de las cuestiones más controversiales y críticas de la cristiandad.
En “Jesús de Nazaret”, del cual se difundieron algunos pasajes el miércoles, el pontífice apela a un análisis bíblico y teológico para explicar por qué no tiene fundamento la afirmación de que los judíos como pueblo fueron responsables por la muerte de Jesús.
Las interpretaciones contrarias se han empleado durante siglos para justificar la persecución de los judíos.
Mientras el Vaticano se ha hecho eco de la conclusión de Benedicto XVI desde hace mucho tiempo, estudiosos judíos dijeron que el argumento desarrollado por el Papa de origen alemán era significativo y contribuirá a combatir el antisemitismo.
“Hay una tendencia humana natural a dar las cosas por sentadas y muy a menudo esto deriva en una falta de lucidez y conciencia” sobre el riesgo del antisemitismo, afirmó el rabino David Rosen, director de asuntos interreligiosos en el Comité Judío Americano y líder en el diálogo judío con el Vaticano.
Señaló que el Vaticano emitió su documento más autorizado sobre la materia en 1965, “Nostra Aetate”, que revolucionó las relaciones de la Iglesia católica con los judíos al afirmar que la muerte de Cristo no podía ser atribuida a los judíos como pueblo ni en esa época ni en la actualidad.
Rosen agregó que las palabras del Papa podrían tener una incidencia mucho mayor debido a que los fieles tienden a leer las Escrituras y comentarios más que los documentos eclesiásticos, en particular los antiguos.
AP.