Dolores Padierna Luna tiene clara la estrategia para este fin de semana. Primero, detonar la discusión y votación en el Consejo Nacional para echar a bajo la alianza electoral entre PRD y PAN en el Estado de México; y segundo, buscar la presidencia nacional que dejará vacante Jesús Ortega.
Se le ve serena, concentrada. Atiende desde su oficina de paredes color amarillo pálido llamadas, habla con periodistas, da instrucciones para concretar entrevistas en los medios de comunicación. Le interesa dejar claro que este fin de semana el tema, además de la sucesión, será el de las alianzas y que ese resultado será determinante para abordar lo relacionado al nuevo presidente perredista.
En un tono serio y directo, dice: “el partido se encuentra al borde de una fractura y la causa de esta división ha sido la alianza con el PAN”… “Todo mundo piensa que lo principal que va ocurrir el fin de semana es el punto de la renovación de la dirigencia nacional, pero en realidad lo que estamos pidiendo y organizando es que se debata, se discuta y se acuerde la cancelación de las alianzas con el PAN rumbo al 2012 y en el Estado de México”.
Augura que sólo quitando la causa de división, el PRD podrá recuperar su unidad y regresaría la línea de un partido de izquierda, de oposición al régimen pues esa ha sido la naturaleza y la función del sol azteca desde su fundación.
Al preguntarle concretamente sobre lo qué va a suceder el fin de Semana, responde que habrá dos pistas de debate y de negociación. “Dos puntos. Intentar que se rechacen las alianzas y esa votación requiere de mayoría calificada, como lo establece el estatuto perredista. Para nosotros este punto principal”, adelanta.
Para los compañeros de Nueva Izquierda, continúa, el punto principal es la sucesión en la presidencia, pero si ellos antes votan la cancelación de las alianzas, la elección de la dirigencia se facilitaría.
Padierna Luna, fundadora del PRD, ex titular de la delegación Cuauhtémoc, ex asambleísta, dos veces ex diputada federal, ex consejera nacional y ahora secretaria de Planeación en el Comité Ejecutivo Nacional, hace cuentas y asegura que nadie tiene mayoría en las votaciones.
“Nadie tiene mayoría calificada aunque digan y digan que sí la tienen. Ni ellos ni nosotros lo tenemos, así que se tendrán que hacer rondas de votación hasta que alguien alcance las dos terceras partes”, vaticina.
Respecto a buscar la dirigencia nacional del PRD, adelanta que hay un plan elaborado con los perredistas de los estados de la República, así como con los consejeros nacionales, “pues con ellos se juega la permanencia o la muerte del partido”.
Declinar o no. Eso depende del nuevo candidato
Al ser la figura antagónica a las corrientes que apoyan a Jesús Zambrano, a la dirigencia nacional perredista, se le pregunta sobre sus cualidades y responde que representa la congruencia, la unidad y los proyectos alternativo que el país requiere.
-¿Por qué los perredistas deben votar este fin de semana por Dolores Padierna?-, se le interroga.
-“Porque nosotros representamos la garantía de que se respetaría la línea política acordada en el congreso y porque también tenemos una visión de triunfo. Hemos entregado buenas cuentas al país y al partido cuando se nos han entregado cargos.
“Los chuchos, déjame decirles así, han ocupado desde la fundación hasta la fecha presidencias en 22 estados de la República, es decir, llevan 21 años como grupo dirigiendo en esos estados, y hoy en día están punto de perder el registro.
“Ellos (los chuchos) tienen una línea colaboracionista con el gobierno y tienen un política de negociar posibles triunfos a cambio de espacitos. Tienen una visión plurinominal y pequeña de la política. Para ellos la política es una agencia de colocación.
“Lo que yo represento es completamente distinto. Nosotros donde hemos recibido la dirigencia del partido los llevamos al gobierno y desde allí hacemos modelos paradigmáticos. Asimismo, podemos demostrar que hay congruencia ideológica con el quehacer cotidiano.
“Y desde luego, yo garantizo la capacidad organizativa para reconstruir al PRD desde las bases en un tiempo corto, a fin de ponerlo a trabajar a todo lo que da para llegar con fuerza al 2012”.
-¿Por qué los perredistas no deberían votar por Jesús Zambrano u otro personaje?-
-“Porque el PRD es un partido que nació de la insurgencia cívica, con ideales de democracia, condensando la historia de todas las izquierdas de México y nació de las grandes causas del pueblo. En ese tenor, el actual PRD no se merece terminar como un partido satélite, paraestatal y al amparo del Poder público.
“Hay que recordar que hubo, bueno todavía hay, partidos creados por los presidentes de la República en turno; instancias políticas que son financiadas por esos gobiernos federales. (Los chuchos) quieren hacer del PRD algo parecido, en detrimento de su fortaleza y su vocación de Poder. Quieren una izquierda plurinominal, testimonial, marginal y eso no se merece el PRD. Este instituto político nació para toma del Poder político y eso lo vamos a consolidar, conmigo lo vamos a lograr”.
-¿Dolores Padierna estaría dispuesta a declinar por un tercer personaje que dirija al PRD?-
“Sí, Si este personaje es de unidad sí estaría en esa posibilidad. Yo declino si viene Lázaro Cárdenas o un personaje como él, es decir, que venga a unir al PRD, ya que un partido dividido, con dos candidatos, con dos visiones, con dos propuestas, no va a ningún lado.
“Yo declinaría, encantada, si se cambia la línea política actual y si viene una presidencia nacional de unidad, de consenso. Podría ser otra personas que dirija el PRD, pero hasta el momento no hemos encontrado quién pueda ser ese personaje”.
-¿Si no fuera Cárdenas, pero si otro candidato como el diputado federal Armando Ríos Piter?-
“Es un compañero muy inteligente, es un diputado muy trabajador, pero es muy reciente dentro del partido, no lo conoce y no garantiza que pueda con este cargo”.
-¿Qué va a pasar si las votaciones no favorecen a las corrientes que representas?-
“No va a pasar nada. Nosotros no vimos de los cargos. Nosotros trabajamos por un proyecto alternativo de nación con o sin cargos. Tenemos un movimiento amplio y si ganamos asumiríamos los cargos de partido para llevarlo hacía esa estrategia de triunfo. Queremos ir a la cita histórica del 2012 con fuerza, así como ganar el estado de México”, reitera.
Balance
Luego de hacer el recuento de su estrategia en el próximo consejo nacional, se le pregunta sobre los resultados de Jesús Ortega, al frente del PRD. Nada entusiasta, afirma:
Fracasos
“Lo que mal empieza mal acaba. Llegó desde afuera. Es la primera vez que un presidente perredista lo pone el Presidente de la República, aunque sea Calderón usurpando de ese cargo.
“La llegada de Ortega fue un agravio para todo el perredismo. Nos lo impuso el mismo tribunal (electoral) que nos quitó la Presidencia de la República y desde esa lógica nuevamente lo que mal empieza mal acaba.
“Con Ortega nunca se logró unir al PRD. Él continuó con una dinámica de grupo, con una dinámica de corriente, decidiendo con su grupo las cosas y operando el aparato para imponer su propia estrategia y no la del partido, ni la de todos los dirigentes.
“Una de las cosas más graves que dejó de hacer fue la atender a los estados. La militancia está olvidada y el programa del partido, el que le dio origen, está en el olvido. Para colmo nos llevó a una aventura de alianzas con el PAN donde el partido perdió todo, la credibilidad, la naturaleza de un partido de izquierda y su identidad en el escenario político. El PRD se revolvió, se diluyó y se confundió”.
Logros
(Suspira y hace una pausa) Hizo todo lo contario a la línea política acordada en Consejo Nacional.
-¿Algo más?- se le insiste.
“Hasta allí. Gracias”, concluye.