A tres días del terremoto y posterior tsunami en el noreste de Japón, las autoridades intensificaron el estado de alerta nuclear en las centrales de Fukushima, Onagawa y Tokai debido a fallas en el sistema de refrigeración de sus reactores.
La Agencia de Seguridad Nuclear Japonesa notificó a la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) que sus centrales presentan fallas en el sistema de refrigeración, lo que mantiene una alerta nuclear ante el temor de una mayor fuga radiactiva.
A las fallas registradas el sábado pasado en Fukushima se sumaron ayer averías en la planta de Onagawa, que registró elevados niveles de radiactividad, aunque más tarde se normalizaron, así como en la central de Tokai, donde falló el sistema de refrigeración en un reactor.
Tokyo Electric Power (TEPCO), la empresa operadora de Fukushima, informó de la posible fusión parcial del núcleo de uno de los reactores de la planta tras un descenso del nivel del agua que cubría el combustible nuclear.
Indicó que las barras de combustible podrían haber registrado una fusión parcial a causa del sobrecalentamiento en el reactor número dos por un fallo del sistema de refrigeración, lo que indica que la situación es crítica, según la agencia japonesa de noticias Kyodo.
La empresa explicó que hubo un momento en el que las barras quedaron totalmente expuestas al bajar el nivel del agua que las cubría, cuando la bomba que inyectaba el líquido al reactor se detuvo por falta de combustible.
En esa situación se produjo un sobrecalentamiento que condujo a la posible fusión del núcleo, un proceso que puede provocar la liberación de una elevada cantidad de radiactividad. Posteriormente los niveles de agua se recuperaron hasta cubrir las barras.
El vocero del gobierno japonés, Yukio Edano, señaló en una rueda de prensa que ya se está inyectando de nuevo agua marina en el reactor.
Según la televisión nacional NHK, que cita fuentes de TEPCO, alrededor del lugar se ha detectado radiactividad, aunque no se han precisado los niveles.
El terremoto de 9.0 grados en la escala de Richter y el posterior tsunami en el noreste de Japón, que ha dejado al menos cinco mil muertos y desaparecidos, causó graves problemas en los reactores 1, 2 y 3 de la central de Fukushima, a unos 270 kilómetros de Tokio.
Los sistemas de enfriamiento de tres de los seis reactores de Fukushima están averiados y, como consecuencia de las operaciones destinadas a detener un inicio de fusión, dos explosiones fueron registradas en los edificios de los reactores 1 y 3, pero éstos no fueron dañados.
Pese a la situación, la Agencia de Seguridad Nuclear de Japón descartó este lunes la posibilidad de un accidente de tipo Chernobyl en Fukushima, según informó el Ministerio de Estrategia Nacional.
“No existe ninguna posibilidad, en lo absoluto, de un Chernobyl”, declaró Koichiro Genba, reproduciendo la opinión de la Agencia de Seguridad Nuclear.
La agencia señaló que tras el terremoto del viernes pasado se paralizó la actividad de 11 de las 51 centrales nucleares que hay en el país, para evaluar los daños.
Notimex.