Militar polémico por sus declaraciones y las denuncias en su contra por tortura que han llegado a instancias como la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), el teniente coronel Julián Leyzaola se encuentra ante uno de los mayores retos de su vida desde que se enroló al Ejército a la edad de 16 años: Dirigir la policía de Ciudad Juárez, Chihuahua.
Como director de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en Baja California y Secretario de Seguridad Pública de Tijuana fue uno de los personajes que enfrentó a la célula del narcotráfico que operaba en esa frontera Teodoro García Simental, “El Teo”, actualmente recluido en un penal de máxima seguridad.
A este personaje y a su célula del narcotráfico que en sus inicios se les vinculó con el Cártel Arellano Félix y luego con el Cártel de Sinaloa, las autoridades en Baja California les atribuyen alrededor de mil muertes, así como decenas de desapariciones y secuestros.
Uno de los operadores de García Simental, fue Santiago Meza López, “El Pozolero”, quien al ser detenido confesó ante los medios de comunicación haber desintegrado en ácido a cerca de 300 personas por órdenes de “El Teo”.
Al frente de las corporaciones policiacas, varios fueron los hechos violentos que marcaron la gestión de Leyzola. Sin embargo, el asesinato de 52 policías estatales y municipales bajo su mando, generaron momentos de tensión entre sus tropas. La hipótesis de los crímenes es que “El Teo” y sus operadores, mataban a los policías para ejercer presión y orillar a Leyzaola a renunciar.
Después, se sabría que los integrantes de esta célula criminal planeaban asesinarlo. Los narcotraficantes incluso, contrataron a un militar desertor para realizar la tarea. El Teniente sin embargo, con el apoyo del Ejército descubrió el plan, capturó al grupo que pretendía matarlo y decomisó varios vehículos que serían clonados como patrullas militares. El plan consistía en disfrazar de soldados a los sicarios para asesinarlo en sus oficinas.
El temperamento fuerte que lo ha llevado a bofetear el cadáver de un sicario que a su vez asesinó a un oficial de la policía, lo convirtió en un personaje respetado por la clase política y empresarial de Baja California, quienes aplauden su mano dura, pero también en un Jefe Policiaco temido y cuestionado por organismos y defensores de los derechos humanos que lo han acusado de tortura ante instancias internacionales.
Desde el jueves 10 de marzo, Julián Leyzaola tiene la nada fácil tarea de tomar las riendas de la seguridad en el municipio más violento de México, cuya tasa de muertes es calculada en 190 por cada 100 mil habitantes –la cifra supera los decesos ocurridos en ciudades como Medellín o Bagdad.
Por lo pronto, mientras regidores locales y representantes de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en la Ciudad señalan que vigilarán de cerca la labor del Militar, una célula del narcotráfico que opera en Juárez, ya lanzó una nueva amenaza de muerte en su contra, lo que lo enfrenta a un reto mayor al que vivió en Tijuana, ciudad en la que a pesar de haber logrado una reducción en los robos y secuestros del 26%, no pudo disminuir el índice de asesinatos que tuvieron un repunte del 19%, en su último año como Jefe de la Policía.
Aquí 10 cosas para conocer más a Julián Leyzaola.
1.- Edad 51 años.
Fecha de nacimiento: 27 de febrero de 1960.
Lugar de nacimiento: Culiacán, Sinaloa.
Su padre y abuelo fueron militares.
A los 16 años se enroló en el Ejército.
En Baja California ocupó los siguientes cargos: Director de Centros Penitenciarios en el Estado; Director del Centro de Readaptación Social “El Hongo”; Director del Instituto Estatal de Seguridad Pública; Director de la Policía Estatal Preventiva y Secretario de Seguridad Pública de Tijuana.
En otros estados trabajó en los siguientes puestos: Director de Planeación de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Tuxtla, Gutiérrez, Chiapas; Director del Registro Estatal de Policías de Oaxaca; Subjefe de Estado Mayor de la 44/A. Zona Militar, en Mihuatlán, Oaxaca; Jefe de la Sección Tercera (Operaciones), de la VI Región Militar, en Puebla, Puebla; Jefe de la Subsección quinta (planes estratégicos), del Estado Mayor de la Defensa Nacional, en México, DF; Jefe de la sección cuarta (logística) de la IX Región Militar, en Acapulco, Guerrero; Jefe de la sección tercera (operaciones) de la décima región militar en Mérida Yucatán; Coordinador General del Curso de Fuerzas Especiales, en Petatlán, Guerrero.
Fue nombrado Teniente Coronel de Estado Mayor el 20 de noviembre de 1999.
2.- Como director de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en Baja California -cargo que ocupo de diciembre de 2004 a octubre de 2006-, 7 elementos de esa corporación fueron asesinados, 5 más resultaron heridos y otros tres salieron ilesos en diferentes ataques.
Una de las hipótesis es que los crímenes o ataques, se cometieron por células del narcotráfico que de esa manera presionaban a las autoridades para provocar la salida de Leyzaola de la corporación, quien ya para ese entonces había decomisado en diferentes operativos policiacos, más de 20 millones de dosis de droga en ciudades como Tijuana y Mexicali.
En octubre de 2006, Julián Leyzaola presentó su renuncia como director de la PEP, luego que las autoridades de Baja California le pidieran no seguir con los operativos que venía realizando.
3.- En diciembre de 2006, el Semanario Zeta de Tijuana lo consideró un “personaje destacado” en Baja California. “El ataque frontal al narcotráfico al menudeo, la detención de sicarios del Cártel de los Arellano Félix y la ausencia de arreglos con el crimen organizado”, fueron los atributos que el periódico que circula en Tijuana desde hace 31 años, observó en el Militar.
Tres años más tarde, los directivos del Semanario lo nombraron “personaje del año”.
Las consideraciones en esta ocasión fueron las siguiente: “En el segundo año como Secretario de Seguridad Pública Municipal de Tijuana la corporación que encabeza, además de los resultados en materia de crimen organizado, ha turnado a 2 mil 970 personas por posesión de droga, 220 por posesión de arma de fuego, ha decomisado 644 armas, turnado a 812 ladrones de vehículo y ha recuperado 3 mil 389 autos robados .
4.- En diciembre de 2007, luego que el Partido Acción Nacional (PAN) recuperara la alcaldía de Tijuana que presidía el priista Jorge Hank, fue nombrado director de la Policía Municipal.
Alberto Capella por su parte –un abogado que se caracterizó por organizar marchas a favor de la seguridad y la paz en Baja California-, fue designado Secretario de Seguridad Pública Municipal.
Como director de la Policía, varias fueron las ocasiones en las que el Teniente Coronel declaró que la “seguridad no era un juego” y que se debía tener conocimiento del tema. Lo anterior en clara alusión y critica a su jefe inmediato, Alberto Capella.
Un año más tarde, en diciembre de 2008, en medio de una ola de violencia que se desató en Tijuana y que esa año dejo 577 muertos, Alberto Capella fue removido del cargo y en su lugar quedó Julián Leyzaola.
5.- En agosto de 2009, dijo por primera vez en una entrevista al semanario Infobaja, una de las frases que más ha repetido a periodistas y medios nacionales e internacionales que le preguntan sobre la estrategia que se debe seguir para combatir a la delincuencia.
“Yo siempre tiro a la cabeza”, declaró.
Leyzaola reconoció que él siempre “tira a la cabeza”, además de criticar la música de Los Tucanes de Tijuana.
6.-En octubre de 2009, fue captado por las cámaras de la prensa cuando golpeaba el cuerpo de un sicario que murió tras un enfrentamiento con policías municipales.
En Tijuana, la acción del Secretario fue duramente criticada por los diferentes grupos de la sociedad de civil, quienes desaprobaron la actitud del funcionario.
El 31 de octubre, el Ejercito en coordinación con la policía municipal, detuvieron a 12 sicarios que participarían en un atentado para asesinar a Leyzaola. La orden dijeron, la dio “El Teo” y para llevarla a cabo contrataron a un militar desertor que también fue detenido. El plan era vestirse de soldados y atacarlo cuando se encontrara en su oficina de la calle 8 en Tijuana.
El sábado 21 de noviembre de 2009, el grupo norteño “Los Tucanes de Tijuana” no se presentó en un concierto programado en Tijuana. Ante más de 11 mil asistentes los organizadores del evento argumentaron que por causas ajenas, el grupo no se pudo presentar. Horas después se sabría que un día antes del concierto, el Teniente Coronel Leyzaola interpuso una denuncia penal ante la PGR contra los músicos por sus presuntos nexos con “El Teo”.
Uno de los argumentos de Leyzaola es que en sus canciones Los Tucanes de Tijuana hacían apología de las actividades delictivas de “El Teo” y sus colaboradores.
Aquí un video de la canción que Los Tucanes de Tijuana le compusieron a “El Teo”.
Aquí el video donde Leyzaola acusa a Los Tucanes de vínculos con el narcotráfico.
7.- Casi al mismo tiempo de acusar penalmente a los Tucanes, un grupo de familiares de policías municipales detenidos por elementos del Ejército, presentaron una queja ante la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) en la que acusan de tortura a Leyzaola, así como de quien fuera su Director de Policía y Tránsito Municipal, Gustavo Huerta Martínez –actual secretario de seguridad pública en Tijuana-.
Los familiares acusaron a los Jefes Policiacos, así como a otras autoridades castrenses, de torturar a los municipales detenidos por supuestos vínculos con la delincuencia.
En la queja, se menciona que los detenidos no sólo estuvieron incomunicados por varios días, también fueron torturados en las instalaciones militares de Tijuana, con el fin de hacerles firmar declaraciones falsas en las que inculparan a varios de sus compañeros en la corporación.
Uno de los policías que en su momentó denunció a Leyzaola de tortura:
8.- En agosto de 2010, la Procuraduría de los Derechos Humanos en Baja California, lanzó una recomendación al Ayuntamiento de Tijuana para removerlo de su cargo como secretario de seguridad pública, pues de acuerdo con las evidencias y testimonios recabados, el Teniente Coronel participó en la tortura y detención injusta de cinco personas.
La medida no fue acatada por el entonces alcalde de Tijuana, el panista Jorge Ramos, quien lo mantuvo en el cargo hasta el último día de su administración.
9.- Como director y luego secretario de Seguridad Pública de Tijuana, alrededor de 70 policías y ex policías municipales murieron. De ese total, a 47 los despidieron con honores, lo que muestra que no estaban involucrados en actividades delictivas.
Al igual que el asesinato de los policías estatales, las autoridades de justicia en el Estado pensaban que los crímenes eran una forma de presión de los grupos del narcotráfico para pedir la salida del Teniente.
Al frente de la policía de Tijuana, alrededor de 400 oficiales fueron dados de baja de la corporación por “pérdida de confianza”. Muchos de ellos fueron detenidos, arraigados y procesados por sus nexos con el narcotráfico.
10.- De los resultados obtenidos en materia de prevención del delito, las estadísticas del gobierno de Baja California demuestran que en los tres años que estuvo al frente de la policía, los robos se disminuyeran en un 26%, los delitos patrimoniales en un 22 y los secuestros en un 26.
Sin embargo, los números también evidencian que los homicidios en el 2010 -que fue su último año de gestión-, se incrementaron en un 19% comparado con las muertes registradas en 2008, uno de los años más violentos para Tijuana desde que el Cártel Arellano Félix se asentó en esta ciudad fronteriza a mediados de la década de los ochenta.
Recuadro de los resultados por Julián Leyzaola al frente de la Policía de Tijuana
Delitos | 2008 | 2009 | 2010 |
Homicidios | 577 | 556 | 688 |
Secuestros | 92 | 95 | 68 |
Robos | 42,046 | 38,073 | 31,495 |
Patrimoniales | 7,906 | 7,106 | 6,153 |