Excélsior publica en primera plana que la diputada federal perredista Esthela Damián reveló ayer que cuenta con cuatro escoltas armados con rifles, debido a que el jefe delegacional de Venustiano Carranza, Alejandro Piña, la tiene amenazada.
Lo anterior, refiere el diario, se había manejado con cierta discrecionalidad, aunque la diputada, quien es presidenta de la Comisión de Vigilancia, tuvo que hacerlo público luego de que se registrara un incidente vehicular, afuera de la Cámara de Diputados, entre su escolta y particulares.
Todo comenzó en la calle Emiliano Zapata, cuando los cuatro guardaespaldas de Damián, encañonaron a la conductora de una camioneta que les había cerrado, sin querer, el paso. La mujer se desmayó por la impresión.
Una señora que conducía una vagoneta color verde sobre Eduardo Molina a la altura del Palacio de San Lázaro, se interpuso, sin darse cuenta, en el camino de los escoltas, asignados por la Sedena, según la legisladora.
Entonces, los escoltas maniobraron para recuperar su lugar, pero el tránsito hizo que ambos vehículos se fueran cerrando el paso. Incluso doblaron a unos metros, en la calle Emiliano Zapata, frente a uno de los accesos principales de la Cámara de Diputados y vino el desenlace.
Fue entonces cuando los escoltas, abrieron las puertas del auto, bajaron, se acercaron al auto y apuntaron hacia sus tripulantes.
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