Reuters publica hoy un análisis sobre la situación de violencia que se vive al norte del país y asegura que México está luchando por evitar un colapso de la ley y el orden en su frontera norte, donde dos estados enfrentan la persistente amenaza de la anarquía criminal.
El analista Robin Emmott sostiene que pese a cuatro años de grandes operativos militares, los cárteles del narcotráfico en los estados de Chihuahua y Tamaulipas han extendido su control en amplias regiones mientras los gobiernos locales parecen ser más impotentes para frenarlos.
“Masivas fugas de prisiones, estaciones de policía abandonadas, despiadados asesinatos y los cárteles extendiendo sus negocios ilícitos como el robo de gasolina de ductos, son la nueva realidad en regiones alguna vez al frente de los esfuerzos de México para modernizarse y prosperar bajo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN”) destaca el artculo.
Sobre las declaraciones de altos funcionarios sobre que México enfrenta una insurgencia de los narcotraficantes, el autor sostiene que “los cárteles de las drogas en México no han lanzado ataques como los de narcotraficantes colombianos, que han hecho estallar poderosos carros bomba en transitadas calles y asesinaron a 107 personas en un atentado dentro de un avión comercial en 1989”.
Sin embargo, destaca que “los sicarios de las drogas en México han detonado explosivos dentro de vehículos y asesinaron el año pasado al menos a 14 alcaldes”. Además de que han muerto más de 34 mil personas por la violencia del narcotráfico desde que el presidente Felipe Calderón lanzó sus operativos en diciembre del 2006.
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