Gobernadores del PAN,<br>políticos <i>reciclados</i>
El Partido Acción Nacional no puede solo. Las últimas tres gubernaturas que ha ganado el blanquiazul no sólo las ha conseguido en coalición, sino además, las ha logrado con políticos que se formaron bajo los colores del PRI o del PRD.
Luego de la jornada electoral en Baja California Sur, el Programa de Resultados Preeliminares le da el triunfo al PAN a la gubernatura, pero también con un político que no nació en su partido.
Marcos Covarrubias Villaseñor, virtual ganador del PAN, dejó las filas del PRD apenas el 10 de octubre de 2010. El político, quien militó bajo el amarillo y el negro del ‘sol azteca’, anunció aquel día su retiro de elección interna para elegir candidato a gobernador; y con ella también vino su separación del partido. Con él se llevó a cientos de militantes a las filas del PAN, que en coalición con el Partido Renovación Sudcaliforniana, lo llevó a la candidatura y –parece ser—a la gubernatura.
Para los triunfos electorales de 2010, Acción Nacional echó mano de políticos con posibilidades de ganar, pero que causaban resquemor en su partido de origen. Rafael Moreno Valle Rosas — que el pasado 1 de febrero asumió la gubernatura de Puebla— fue diputado local por el PRI, partido del que se separó en marzo de 2006. En Sinaloa, el Gobernador Mario López Valdés se retiró del tricolor, partido por el que fue Senador de la República, en febrero de 2010. Por último, el virtual gobernador electo de Guerrero y priista de cepa, Ángel Aguirre, fue acogido por el PAN cuando su candidato Marcos Parra declinó a favor de la alianza PRD, PT y Convergencia.
En distintas ocasiones, panistas de renombre han mostrado su rechazo a las alianzas en sus discursos aunque, en el ‘campo de batalla’, sus actitudes no hayan sido congruentes. Para ejemplo, Diego Fernández de Cevallos. A principios de este mes, el ‘jefe’ visitó Baja California Sur para respaldar al candidato de su partido. Sin embargo, al pedirle su opinión sobre las alianzas de su partido, el político las rechazó categórico.
“Me parece absolutamente inadmisible, sobre todo, si hablamos de un Partido Acción Nacional con la trayectoria que tiene y con la obligación que tiene de mantener un perfil ideológico y político que, en buena medida, lo ha perdido por las alianzas en las que yo no estado de acuerdo”, zanjó en su breve visita al estado.
No obstante, la cúpula blanquiazul ha defendido las coaliciones hasta con argumentos ‘caricaturescos’. El dirigente nacional del partido, Gustavo Madero, dijo a finales del año pasado que las alianzas son “kryptonita” para el Partido Revolucionario Institucional y, por ello, las critican y las intentan evitar.
Además, señaló que en zonas del país donde, por 80 años, no han conocido la alternancia, las alianzas se justifican “plenamente”.
Cabe resaltar que las primeras elecciones que ganó el PAN en el sexenio fueron con candidatos completamente blanquiazules, con Juan Manuel Oliva, quien fue electo gobernador de Guanajuato en 2006; Marco Antonio Adame, quien gobierna Morelos desde 2006; José Guadalupe Osuna Millán, quien fue electo gobernador de Baja California en 2007; Emilio González Márquez, gobernador de Jalisco desde 2007.
Con la victoria de Marco Covarrubias Villaseñor, serían también cuatro los candidatos provenientes de otros partidos que ganan una gubernatura para Acción Nacional, todos desde 2010.
