Dinero “fast track”; doce mdp para proyectos diversos en Yucatán
Opichén es un municipio ubicado en el sur de Yucatán, en un punto intermedio entre Muna y Maxcanú. Su territorio es de 268 kilómetros cuadrados y tiene poco más de cinco mil habitantes distribuidos en su cabecera, sus comisarías y rancherías.
Como en la mayor parte de los municipios pequeños, sus habitantes se jactan de conocerse entre sí o, al menos, a la mayoría de quienes viven en el poblado y sus alrededores.
Sin embargo, nadie supo informar sobre Fernando Chin Mena, quien aparece como solicitante de apoyos del Programa de Adquisición de Activos Productivos en 2010.
De acuerdo con documentación de la Secretaría de Fomento Agropecuario y Pesquero del gobierno del Estado, Chin Mena es un ganadero a quien le “dictaminaron” apoyos de $686 mil pesos, por la vía del “fast track”, para adquisición de ganado e instalación de infraestructura.
Uno de nuestros reporteros estuvo en la cabecera de Opichén y en Calcehtok, la comisaría principal. Habló con vecinos y autoridades y nadie conoce a Chin Mena.
Se concedió el beneficio de la duda: es probable que esté en alguna comunidad apartada, pero a los grupos organizados de productores agropecuarios del municipio se les hace raro, porque al menos sabrían de él.
El alcalde, Armando Calam Leydón, confirmó que no se conoce a nadie con ese nombre y ofreció averiguar con más detalle.
Las familias que llevan ese apellido en la cabecera son Chin Chin y Chin Avila. Esta última tiene un rancho, pero sus integrantes no saben de alguien apellidada Chin Mena.
Documentos en poder de Grupo Megamedia muestran que Fernando Chin recibió, a principios de 2010, un dictamen a su favor con el “folio estatal” YN10004343. Su proyecto considera siete puntos, de los cuales cinco corresponden a infraestructura; los otros dos son para adquisición de sementales bovinos “con registro genealógico” y para compra de “vientre bovino desde 240 kg”.
El proyecto abarca inversiones de casi 798 mil pesos, pero el apoyo “dictaminado” es de 686 mil pesos.
Ese proyecto forma parte de un paquete aprobado por la vía del “fast track” a principios de 2010, en medio del incumplimiento de las normas sobre la publicación de los apoyos.
Los recursos ascienden a doce millones de pesos de procedencia federal porque, hasta entonces, el gobierno del Estado no había entregado su parte.
Esos recursos son parte de un presupuesto de 315 millones de pesos en apoyos al campo cuyos detalles se desconocen porque no se publicaron las listas de proyectos aprobados y sus beneficiarios desde fines de 2009.
Asistencia y capacitación con bolsa de 38 millones
El programa Soporte manejó en 2010 un presupuesto de 38 millones de pesos para asistencia técnica y capacitación a productores del campo yucateco.
Ese rubro incluye los dos millones de pesos, en números redondos, que la Secretaría de Fomento Agropecuario y Pesquero (Sfayp) del gobierno del Estado canalizó a cursos para once agrupaciones mieleras de igual número de municipios.
Esa cantidad, como informamos ayer, fue cobrada por el Centro de Evaluación del Sureste, que reportó en sus facturas un domicilio fiscal que corresponde a un negocio de venta de café.
El programa Soporte es uno de los componentes del Programa de Adquisición de Activos Productivos, así como hay los de ganadería, agricultura y pesca.
Para solicitar los recursos, el productor o grupo de productores presenta un proyecto y, por lo general, indica a la agrupación que desea como capacitadora.
La norma de operación dice que se les puede pagar a los productores y éstos, a su vez, pagan al capacitador. Sin embargo, la Secretaría también puede pagar directamente al despacho respectivo, siempre y cuando lo autoricen los interesados.
El Centro de Evaluación del Sureste aparece como capacitador de numerosas agrupaciones mieleras. En recibos de pago consta que la Secretaría dispone el pago directo a esa empresa, no a los productores.
Las sumas varían: en las facturas en poder de Grupo Megamedia se pueden ver, por ejemplo, pagos de 223 mil 300 pesos y otros de 40 mil, pero sólo corresponden al 70% del importe total.
Una de las agrupaciones a las que se autorizó un apoyo parcial de 223 mil 300 pesos es “Mun-Ha”, de Muna. En la factura se reporta como su domicilio la calle 26 # 149.
Allí vive en realidad el principal dirigente de la agrupación, Augusto Casanova Casanova.
Uno de nuestros reporteros trató de entrevistarlo, pero no fue posible. En la mañana se dijo que había ido a su parcela y regresaría a las 7 de la noche. Después se indicó que estaba “pisteando” (embriagándose).
Sin embargo, un productor de esa organización indicó que son unos 25 ó 30 los socios fijos que participan en las capacitaciones, que por lo general son de siete sesiones o menos.
Añadió que a fines del año recibieron un curso, pero no supo precisar si era “del gobierno” o de la empresa que les compra. En el caso “del gobierno” dijo que es una mujer joven quien les imparte la capacitación. Incluso, dijo que ayer lunes tendrían una sesión.
Con la firma de Luis Jorge Vela Hernández, vocero de la Secretaría de Fomento Agropecuario y Pesquero, recibimos una carta que en su parte medular dice:
“El Centro de Evaluación del Sureste, S.C.P., estaba en la dirección que menciona el Diario. Sin embargo, actualmente despacha en la calle 34 No. 521-A entre 69 y 71 de la colonia Vicente Solís.
“La dirección que aparece en las facturas es de su anterior despacho. No está en las facturas que esta empresa emite a partir de 2011.
“Las facturas corresponden no a uno, sino a once cursos de capacitación y asistencia técnica para once grupos distintos de productores y fue por un importe de un millón 396 mil pesos correspondiente al 70%. El importe total de los once cursos de capacitación y de asistencia técnica es de un millón 995 mil pesos.
“No existe ningún problema con la emisión de facturas correlativas. El concepto para el pago de las facturas es similar, pues estos once cursos así fueron autorizados a once agrupaciones de productores de miel en el marco del Programa Soporte, Componente Asistencia Técnica y Capacitación, Servicio de Proyectos estratégicos.
“Los servicios de capacitación son solicitados por las agrupaciones.
“De ninguna manera el Centro de Evaluación es proveedor de la Secretaria de Fomento Agropecuario y Pesquero, ni mucho menos la dependencia dispuso el pago directo al prestador de servicios.
“El sendero del águila sí existe, pero el prestador de servicios tuvo un error al elaborar la factura. Se solicitó la corrección.
“Sendero Nuevo Amanecer también existe y menciona la dirección de Motul como su dirección fiscal. Algunos miembros de la familia Cervantes Solís son integrantes de esa organización”.
La carta ratifica varios puntos de la información que publicamos ayer: la dirección fiscal que consta en facturas del Centro de Evaluación del Sureste no corresponde a la realidad; “El sendero del águila” no está en el lugar que se indica en los documentos oficiales; son once facturas para cursos a igual número de agrupaciones, y el concepto que aparece en dichas facturas es idéntico.
Indicamos que “El sendero del águila” no existe porque no hay registros de ese grupo y tampoco tiene su local en la dirección que se asienta en la factura. En el caso de “Sendero nuevo amanecer” señalamos que sí existe, aunque en directorios tiene registro de ganadería, no de apicultura.
De la carta se desprende que el Centro de Evaluación reportó un domicilio falso en facturas que presentó en diciembre de 2010.
