El diario Milenio apunta la advertencia que hiciera ayer el presidente Felipe Calderón sobre aplicar todo el peso de la ley a quienes agredan a los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) una vez que la propia dependencia y el Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM) informaron que suman 900 denuncias en la impunidad.
La declaración presidencial se hizo en el marco de la modernización de la red eléctrica en el Centro Histórico de la capital mexicana, donde detalló que se invertirán 700 millones de pesos para introducir nuevo cableado subterráneo en 124 manzanas, que beneficiarán a 130 mil personas con obras que durarán 18 meses.
Al detallar los procesos de modernización en la dependencia, el director de la CFE, Alfredo Elías Ayub, destacó que a 14 meses de la “histórica y trascendente” decisión de extinguir el organismo que operaba el servicio eléctrico en el valle de México (LFC), hay un ambicioso programa de construcción de infraestructura que prevé 64 obras mayores, como las 11 subestaciones y ocho líneas de transmisión que fueron inauguradas ayer, para garantizar la disponibilidad inmediata de servicio.
A poco más de un año de la extinción de Luz y Fuerza del Centro, Calderón señaló que “el gobierno federal tomó una decisión difícil, compleja, pero afortunadamente el tiempo nos ha dado la razón.”
También anunció que se congelará por un tiempo la transición de la tarifa de bajo consumo de personas de escasos recursos, por la de alto consumo, si se comprueba que en un lapso de seis bimestres no hay variación del suministro.
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