Desde 1992, aproximadamente 800 periodistas han sido asesinados alrededor del mundo y la muerte del corresponsal de defensa del Sunday Mirror, Rupert Hamer, ocurrida el 9 de enero de 2011 en Afganistán, echó nueva luz sobre los peligros de la profesión.
Un reporte del Comité para la Protección a los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) refiere que Paquistán se ha convertido en el país más peligroso para ejercer el periodismo, superando el número de reporteros muertos en el último año en Irak –de 44 asesinatos con motivos confirmados, ocho de ellos fueron en Paquistán-.
En el caso mexicano se tienen registradas 56 muertes; 24 de ellas con motivos de muerte vinculados a su labor periodística; tres de trabajadores de medios; y 29 periodistas fallecieron sin que se sepan bien a bien las causas de su muerte.
De cualquier forma, Irak se mantiene como el país con el mayor número de periodistas asesinados desde 1992, con 145 muertos, de los cuales se tienen registros.
El Comité para la Protección a los Periodistas ha podido confirmar las causas de algunas de las muertes de los 800 periodistas fallecidos; los reportes publicados por el CPJ se realizaron con información proveniente del todo el mundo y muestran de manera clara el incremento de riesgo al ejercer la profesión.
Veamos el caso de México.
En el PDF, en primer lugar aparecen las 24 muertes cuyos motivos son conocidos; tres casos de personas vinculadas laboralmente a algún medio; y, al final, las 29 muertes registradas pero de motivos desconocidos.
Periodistas mexicanos muertos
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En su Balance de la Libertad de la Prensa 2010, Reporteros Sin Fronteras (RSF) destacó que la violencia del narcotráfico ha logrado tener una fuerte incidencia en la manera en que se trata la información en México.
De acuerdo con los datos del estudio, a nivel mundial en 2010, 57 periodistas murieron a causa de su trabajo. En México fallecieron un total de siete profesionales de la información, cifra que lo ubica sólo por debajo de Paquistán, con 11 muertes, y al mismo nivel que Irak, con siete decesos.
Con estas cifras, Paquistán, Irak y México se ubican como los tres países más violentos para los periodistas durante la última década.
Estos datos contrastan con los de la ONG “Campaña para un Emblema de Prensa“, que sitúa a México como el país más peligroso para el ejercicio periodístico, con 14 asesinatos en 2010, cifra similar a la de Paquistán.
Dicho reporte señala que América Latina fue la región más peligrosa para ejercer el trabajo periodístico; ocurrieron 35 de los 105 asesinatos de periodistas registrados en 2010.