Uno de los líderes de un grupo de homicidas pertenecientes al Cártel del Golfo fue aprehendido por elementos de la Policía Federal en Tamaulipas. Martín Armando Briones Muñiz o Eduardo Flores Borrego, El Negro, era el presunto encargado de coordinar a un grupo de 32 sicarios que operaban en distintos puntos del estado.
Según un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública, El Negro tenía la función de eliminar a los integrantes de grupos rivales. Además, se le relaciona con varios enfrentamientos, homicidios y plagios ocurridos en Ciudad Mier y Reynosa, así como el cobro de dinero por eliminar a Los Zetas.
El Negro fue capturado junto con otros dos hombres: José Alfredo Guerrero Villalpando, El Arlin, in, y Héctor Enrique Zapata Escamilla, El Chisqueado, presunto responsable de monitorear a las autoridades del estado.