Tras su salida de la cárcel, el gobierno de Estados Unidos busca elaborar un caso contra el fundador del sitio WikiLeaks, Julian Assange, por su participación en la difusión de documentos clasificados de las embajadas de ese país.
The New York Times publicó hoy que Fiscales federales estadunidenses buscan evidencia o complicidad durante el contacto que Assange tuvo con el soldado Bradley Manning, un analista de inteligencia del Ejército sospechoso de filtrar la información.
Funcionarios del Departamento de Justicia intentan averiguar si Assange animó e incluso ayudó Manning, quien se encuentra en una cárcel de Virginia, para extraer los archivos clasificados militares y del Departamento de Estado con la finalidad de esparcirlos a través de Wikileaks.
De concretarse esas sospechas, explicó el rotativo estadounidense, Estados Unidos podría acusar al fundador de Wikileaks de conspirar en la filtración de los datos, no sólo como un receptor pasivo de los documentos sino como la persona que después los publicó.
Los fiscales que buscan inculpar a Assange analizan una conversación en línea en la cual el soldado Manning afirma que había estado en comunicación directa con el fundador de Wikileaks.