Los periodistas amenazados o perseguidos por la delincuencia organizada ya tendrán un refugio. La asociación civil llamada “La Casa de los Derechos de los Periodistas” – en la cual participan alrededor de diez organizaciones no gubernamentales- ya consiguió una vivienda. Ahora habrá que pagarla y remodelarla. El primer donador de dinero en efectivo será el gobierno de la ciudad de México. En los próximos días se firmará un convenio cuyo monto aún no ha sido revelado públicamente.