Una nueva dirigencia nacional del PAN encabezada por Gustavo Madero respaldará la lucha contra el narcotráfico y dará su apoyo político a la estrategia implementada hasta ahora por el presidente Felipe Calderón, afirmó el senador Rodolfo Dorador.
En entrevista, el coordinador de la campaña de Madero aseguró que este respaldo se mantendrá incluso después de 2012, sin importar cuál partido gane las elecciones.
“La lucha contra cualquier actividad ilícita es frontal, llámese defraudación fiscal, tráfico ilícito de personas o narcotráfico. Quien no se ajuste a lo lícito, quien no trabaje dentro de la legalidad, como lo hacemos todos, será combatido.
“La única forma de sacar adelante al país es por la vía legal. La estrategia que ha instrumentado el presidente Felipe Calderón ha sido un esfuerzo enorme que no debe ser sólo del Presidente, sino de todas las autoridades del país.”
En ese sentido, expresó que el equipo comandado por Madero no abandonará su posición de combatir al crimen “sin importar el color ni el partido” del próximo presidente.
A pregunta expresa, en referencia a lo señalado por el exdirigente nacional Germán Martínez respecto a respaldar políticamente a Calderón cuando deje la presidencia, Dorador resaltó que este apoyo se mantendrá porque la estrategia contra el crimen organizado ha sido la correcta. Esto, incluso, a pesar de que Madero no pertenezca al grupo del Presidente, indicó.
“Madero es la opción para el PAN porque estará de tiempo completo en el partido (pidió licencia en el Senado), porque trabajará por la unidad y porque no pertenece a un grupo. Esto en vez de ser una debilidad es una fortaleza.
“Su dirigencia se dedicará a construir liderazgos que nos ayuden a refrendar el triunfo del PAN en 2012”.
Y aunque se negó a dar números de los apoyos con los que cuentan, coincidió con la expresión del propio Madero, que el pasado viernes aseguró en Culiacán que están cerrando “a tambor batiente”.
En función de los procesos electorales que le tocará asumir a la nueva dirigencia, Madero ha centrado su campaña en impulsar la construcción de una “mega alianza”, primero entre panistas y luego de los panistas con otros partidos, con los ciudadanos y con las organizaciones sociales y democráticas.
“Porque si algo esperan los mexicanos es que los políticos nos pongamos de acuerdo” o, al menos, es lo que sostiene el candidato en cada reunión en la que participa.