El máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Alfonso Cano, murió hoy en un paraje del sur del país, informó hoy el Ministerio de Defensa.
Cano, cuyo verdadero nombre era Guillermo León Sáenz, cayó en un operativo de las Fuerzas Militares en la población de López de Micay, en el sureño departamento de Cauca.
El guerrillero había resultado herido la mañana de este viernes en un bombardeo y después fue abatido en un combate registrado por la tarde.
El cuerpo del líder rebelde fue identificado por fuentes castrenses, luego de una intensa persecución que las tropas oficiales tenían en su contra desde hace dos años.
La muerte de Cano se conoció poco después de que el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, reveló que al menos seis guerrilleros -entre ellos el jefe de seguridad de Cano- habían muerto en un bombardeo del Ejército.
El funcionario indicó que uno de los rebeldes muertos era conocido como el “Indio Efraín” jefe de seguridad de Cano, además de tres miembros de la seguridad de Cano y alias ‘El Zorro’, un operador de radio que llevaba 14 años acompañándolo.
En las operaciones también habría caído la compañera sentimental de Cano, aunque la identidad de la mujer no ha sido confirmada.
Cano reemplazó al fundador de las FARC, Manuel Marulanda, alias “Tirofijo”, quien falleció en 2008 en la selva de causas naturales.
La fotografía
Una fotografía tomada por un soldado del Ejército colombiano al cuerpo del abatido jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Alfonso Cano, confirmó que se trata del líder guerrillero, reveló esta noche la televisión local.
El teleinformativo Caracol informó que la imagen del rostro del máximo jefe de las FARC, fue enviada a Bogotá y cotejada con las que tienen los organismos de seguridad.
Aunque medios locales confirmaron la muerte de Cano en un bombardeo en el municipio de Suárez, el presidente Juan Manuel Santos espera el éxamen a las huellas dactilares para comunicar la noticia al país.
El jefe de la Policía, general Oscar Naranjo, había advertido semanas antes que la Fuerza Pública “le respiraba en la nuca” al líder insurgente y que “sus días estaban contados”.
La zona donde fue abatido Cano es uno de los mayores bastiones de las FARC, la mayor y más antigua guerrilla del país, por lo que el Ejército había concentrado su persecución en esa región.
Notimex