“Calderón lo ha intentado, pero no ha podido hacer prevalecer la mentira sobre la verdad”, escribió Rafael Rodríguez Castañeda en la edición más reciente de Proceso, como respuesta a lo transmitido por Televisa la semana pasada: que el narcotraficante Sergio Villarreal Barragán, alias El Grande, pagó 50 mil dólares al reportero Ricardo Ravelo para que no lo mencionara en reportajes.
El director de Proceso aseguró que “Televisa es un medio disponible para el actual gobierno. No es el único; sí el más poderoso y servicial”, y acusó a la televisora de ser el vehículo por el cual el gobierno encabezado por Felipe Calderón emprendió un embate contra la revista.
“Un medio de comunicación independiente acaba convirtiéndose, para un gobierno autoritario, en un enemigo real o imaginado. Así lo es Proceso para el gobierno que encabeza Calderón”, sentenció Rodríguez Castañeda, quien además recordó que los lectores de medios impresos independientes no son actores pasivos, sino activos que ejercen su opinión y ponen en evidencia la “calidad” del tipo de medios como Televisa.
En el reportaje central, Proceso consignó que la revista nunca dejó de hablar de El Grande, y que la prueba está en que a partir de 2007 –cuando la figura de este narcotraficante se hizo notoria-, el semanario lo abordó en 27 reportajes y cuatro ediciones especiales publicadas entre ese año y 2010.