México y Centroamérica encabezan las regiones más críticas de América Latina y el Caribe donde se presenta mayor violencia hacia las mujeres, de acuerdo con el informe “Del compromiso a la acción” de ONU Mujeres y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
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Pese a la aprobación de leyes severas para frenar las agresiones a mujeres, éstas no disminuyen en América Latina, la región más violenta del mundo contra las mujeres, sin estar en un contexto de guerra.
En el caso de México, el país, junto con el norte de Centroamérica (Honduras, El Salvador y Guatemala), se presentan niveles de crisis severa respecto al feminicidio. La ONU consideró que las cifras de este delito están tomando una magnitud y ensañamiento devastador, ya que dos de cada tres mujeres asesinadas mueren a causa de su género.
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Además, tres de los 10 países con las tasas más altas de violaciones de mujeres y niñas se encuentran en el Caribe.
Cultura patriarcal de la legalidad
El informe constata que 24 de los 33 países de América Latina y el Caribe cuentan con leyes contra la violencia doméstica, pero solo nueve de ellos han sancionado leyes que tipifican una variada gama de expresiones de violencia contra las mujeres, tanto en el ámbito privado como público.
También destaca que 16 países han tipificado penalmente el feminicidio y algunos han encuadrado en la legislación los nuevos contextos de criminalidad, como el narcotráfico y el cibercrimen, o expresiones de violencia política y el ataque con ácido.
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Para enfrentar el problema, Naciones Unidas recomienda robustecer las instituciones, dar continuidad a las políticas públicas que combatan la violencia y empoderen a la mujer y asignar mayores recursos para ponerlos en marcha.
También pide cambiar los “patrones culturales patriarcales” que, basados en tradiciones y creencias religiosas, “están fundados en las relaciones de desigualdad e inequidad entre hombres y mujeres”.
El informe de la ONU señala que, en todo el mundo, 35% de ellas ha sido víctima de violencia por parte de su pareja o de agresión sexual por parte de personas distintas de su pareja.
Con información de AFP.