El oficialismo logró un amplio triunfo en las elecciones regionales de este domingo en Venezuela, un resultado que es objetado por la oposición que anunció que pedirá una auditoría total del proceso.
Según los datos ofrecidos por la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ganó 17 de las 23 gobernaciones y la oposición, reunida en la coalición de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se impuso en 5. Aún queda un estado por asignar ganador, Bolívar.
“Es una victoria tajante. El chavismo arrasó en las elecciones”, dijo el presidente, Nicolás Maduro, al poco de conocerse los resultados.
Maduro presumió del triunfo en el 75% de las gobernaciones, que podría aumentar al 78% si se impone también en Bolívar.
Con una participación del 61,14%, más alto de lo habitual en unas elecciones regionales, el chavismo ganó el 54% de los votos por los 45% de la oposición, según Maduro.
La oposición, que había logrado un gran triunfo en la última cita electoral en la que se midieron ambos frentes, las legislativas de 2015, había proclamado una victoria “gigantesca” horas antes del anuncio del CNE.
En torno a la medianoche del domingo, Gerardo Blyde, un portavoz de la MUD, expresó el rechazo de la oposición a las cifras ofrecidas por el CNE.
“No reconocemos los resultados anunciados por el CNE”, dijo Blyde, quien recordó que antes de que las autoridades electorales anunciaran esos datos ellos ya habían advertido que no se corresponden con la información que manejaba la coalición.
“Ellos saben que no son mayoría. El país y la comunidad internacional también lo saben”, apuntó.
Blyde informó que la oposición exigirá una auditoría total de todo el proceso -algo que ya Maduro había anunciado- e indicó que mientras eso no ocurra “no reconoceremos ninguno de los resultados”.
También dijo que convocarán a actividades de calle en los próximos días para apoyar este reclamo.
El portavoz de la MUD afirmó que el proceso electoral estuvo caracterizado por unas condiciones abusivas, con violaciones sistemáticas de las reglas y por la falta de transparencia, pese a lo cual la oposición insistió en participar.
“Lo intentamos. Lo hicimos con la conciencia de los demócratas”, señaló.
A la elección se llegó en un clima de grave crisis económica y de conflicto político tras cuatro meses de protestas antigubernamentales de abril a julio que dejaron unos 120 muertos.
Durante ese período, además surgieron cuestionamientos en torno al CNE luego de que la empresa Smartmatic, responsable del software que utilizan las máquinas de votación, denunció irregularidades en los datos de participación que dio el ente el 30 de julio, día de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
El CNE rechazó esos señalamientos.
La oposición no participó en la elección de la ANC pues consideraba que fue convocada de forma inconstitucional.
En ese contexto, la decisión de acudir a los comicios regionales generó una fuerte discusión al interior de la MUD y derivó en la salida de la coalición de algunas personalidades como la exdiputada María Corina Machado.
En su comparecencia, Blyde hizo un llamado a todos los líderes opositores “que están en la unidad y fuera de la unidad” para planificar conjuntamente una nueva estrategia frente a la actual situación que enfrentan.