El país considerado como “cuna de la moda” y referente para modelos de todo el mundo continúa dando pasos para luchar contra la anorexia y acabar con la proyección de imágenes de cuerpos poco saludables.
[contextly_sidebar id=”zgwf9igvmiRcatesOBFdDDRXDdaNTK5G”]En Francia, los trastornos alimenticios no son para nada un tema secundario. Según datos del Eurostat, es el segundo país de Europa en el que viven más personas por debajo de su peso apropiado -4,2% de la población, solo una décima por detrás de Chipre- atendiendo a su índice de masa corporal (calculado en base a la relación entre peso y altura).
Por ello, en el país galo entró en vigor este domingo una nueva medida dirigida a acabar con la promoción de la delgadez extrema en los medios: la prohibición de publicar, sin aviso expreso, imágenes publicitarias de modelos alteradas digitalmente para aparentar un peso diferente.
Así, las firmas que publiquen por ejemplo las características fotos comparativas del “antes y el después” de usar un milagroso producto mostrando a una misma persona mucho más delgada a base de Photoshop, deberán incluir un rótulo en el que se lea de manera clara: “fotografía retocada”.
De no hacerlo, la empresa se podría enfrentar a una multa de US$44.000 o el 30% del coste de elaboración del anuncio.
El objetivo es “evitar la promoción de ideales inaccesibles de belleza y prevenir la anorexia entre los jóvenes”, dijo la ex ministra de Salud, Marisol Touraine, cuando presentó la legislación.
“Exponer a los jóvenes a imágenes corporales normativas e irreales conduce a un sentimiento de autodesprecio y a una baja autoestima que puede tener un impacto en el comportamiento relacionado con la salud”, agregó.
La nueva ley francesa, que ya está en vigor en otros países como Israel, no afecta sin embargo a otras modificaciones digitales en fotos como retoques en el cabello o sobre manchas e imperfecciones en la piel.
Getty Images, uno de los principales bancos de material audiovisual del mundo, anunció también que dejaría de proveer este tipo de imágenes retocadas a medios de comunicación y clientes particulares a partir del domingo como consecuencia directa de la decisión tomada en Francia.
Esta nueva norma forma parte de una iniciativa más amplia conocida popularmente en Francia como “Ley maniquí”.
Desde el pasado mes de mayo, es obligatorio que todas las personas que trabajan como modelos en Francia presenten un certificado médico que confirme que no están demasiado delgadas.
Como anunció el ministerio de Salud, el informe debe confirmar “que el estado global de la persona (…), evaluado principalmente a partir de su índice de masa corporal, le permite ejercer su trabajo”.
A principios de septiembre, también se anunció que las grandes casas de lujo francesas LVMH y Kering -responsables de marcas como Dior, Louis Vuitton y Gucci, entre otras- se comprometían a dejar de contratar maniquíes demasiado delgadas y de usar la talla 32 europea (talla cero en Estados Unidos) para mujeres y talla 42 para hombres en sus castings.
Si bien estas medidas no acabarán automáticamente con la anorexia, sí pueden suponer pequeños pasos para concienciar y alertar sobre la enfermedad.
“Es simplista sugerir que ver imágenes tratadas con Photoshop causa trastornos de la alimentación. Pero muchas personas que ven imágenes modificadas tienen una baja autoestima. Apoyamos cualquier medida que contribuya a que la sociedad tenga una visión más saludable de los tipos de cuerpo y sea consciente de qué fotos han sido retocadas”, dijo a la BBC Tom Quinn, de la organización británica Beat sobre desordenes alimenticios.
“Los anuncios venden más que los productos. En gran medida, nos dicen quiénes somos y quiénes debemos ser”, destacó sobre la importancia de la publicidad Jean Kilbourne, escritora y activista experta en la imagen de las mujeres en los medios.
La psicóloga Terri Apter le dijo a la BBC que si bien siente que “este tipo de cultura” podría cambiar, está sucediendo de manera muy lenta.
“No hay menos anorexia que hace 25 años, pese a todo el esfuerzo que han hecho muchas personas”. Mientras que la ley francesa “en sí mismo” no “tendrá un gran impacto en la cultura”, protegerá a las modelos, añadió.
Según cifras citadas por diversos medios como Radio France, se estima que los trastornos alimenticios afectan a unas 600.000 jóvenes -40.000 de las cuales viven con anorexia- y son la segunda causa de mortalidad entre las personas de 15 a 24 años, por detrás de los accidentes de tráfico.