La única esperanza de que la vaquita marina, el único mamífero marino endémico en México, pueda salvarse de la extinción es una veda permanente a la pesca con redes de enmalle en el Golfo de California y el desarrollo de técnicas de pesca alternativas.
[contextly_sidebar id=”vsZeXBc3YeyeyU6wuam5pv4BBPjyowxS”]De lo contrario, el gobierno mexicano, así como el de Estados Unidos y China serán los principales responsables de la extinción de esa especie, afirma el informe “Se esfuma la vaquita: Salvando al mamífero marino más amenazado del mundo”, del Foro Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
El documento reitera que la principal amenaza para la vaquita marina es la pesca y el comercio ilegal de totoaba —pez en peligro de extinción, cuya pesca está prohibida desde 1975— cuya vejiga alcanza un precio de 8 mil 500 dólares por kilo en el mercado negro y que se exporta a China por la falsa creencia de que tiene efectos medicinales y afrodisíacos.
Luego de considerar que quedan menos de 30 ejemplares, que la población de este mamífero endémico ha disminuido 90% en 6 años y que la inversión de 1, 200 millones de pesos del gobierno mexicano no ha servido para rescatarla, el Foro Mundial para la Naturaleza emitió una ruta crítica de 10 acciones para asegurar el futuro de la vaquita marina.
El estudio también incluye medidas que los gobiernos de China y Estados Unidos pueden poner en marcha para ayudar a combatir la pesca y comercio ilegal de la totoaba:
El pasado 11 de mayo, el actor Leonardo Di Caprio, uno de los personajes que más impulsan las campañas del WWF, pidió a los mexicanos hacer presión para que el gobierno de Enrique Peña Nieto atienda las acciones urgentes para rescatar a la vaquita marina.
“Hagámosle saber al presidente de México, Enrique Peña Nieto, que demandamos acción para proteger a la vaquita marina hoy”, escribió el actor en su cuenta de Instagram.
El mandatario no tardó en responder una serie de mensajes en los que aseguró que su gobierno eliminó una de la “principales causas de muerte” de la especie, la pesca de camarón y la veda en el área.
Lo cierto es que 10 años de estrategia para proteger a la vaquita y más de 1,200 millones de pesos invertidos, tienen a 30 ejemplares al borde de la extinción.