[contextly_sidebar id=”Njnq1EtRX62dATac48fM8WOaavTRIFvP”]Las obras que Rafael Moreno Valle contrató en Puebla bajo el concepto Proyectos de Prestación de Servicios (PPS), le costarán a los poblanos 30 mil 658 millones de pesos que deberán pagar en los próximos 25 años, aun cuando el exgobernador de extracción panista nunca las catalogó como deuda pública.
Aunque bajo el concepto de PPS Moreno Valle contrató obra pública y argumentó legalmente que no se trataba de una deuda, datos de la Secretaría de Finanzas de la actual administración muestran que por tres obras (Plataforma Audi, el Museo Internacional Barroco y el Centro Integral de Servicios) las empresas contratadas con esta figura obtendrán ganancias que superan entre 242 y 348% su monto de inversión.
Por ejemplo, por el Museo Internacional Barroco, el conglomerado formado por Concretos y Obra Civil del Pacífico –subsidiaria de Grupo Higa que encabeza José Armando Cantú Hinojosa−, y las firmas La Peninsular y Promotora de Cultura Yaxché −ambas compañías de la familia Hank Rhon− se invirtió 1,742.9 millones de pesos, pero el gobierno de Moreno Valle pactó un pago mensual de 27.9 millones por 280 meses (poco más de 23 años).
Por este museo los poblanos terminarán pagando 7 mil 815 millones de pesos. Cuatro veces más del costo contratado.
El monto a pagar por las tres obras mencionadas es incluso superior a los 27 mil 90 millones de pesos que el gobierno de Moreno Valle destinó a inversión pública durante los seis años de gestión, según los datos de la Cuenta Pública estatal 2011-2016.
En su último informe de gobierno, Rafael Moreno Valle dijo que, cerró con una deuda de sólo 8 mil 608 millones de pesos y presumió lacreación de museos e infraestructura pública sin haber pedido “un solo prestado”.
Según la ley, el monto que se deberá pagar por estas obras no es deuda. El 19 de septiembre de 2012, el Congreso del estado aprobó una iniciativa que modificó la ley de deuda pública para exentar a los Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) de ser calificados como deuda, lo que permitió que Moreno Valle dejara a Puebla con esta obra pública contratada hasta por 25 años.