Más de 120 fosas, 14 mil restos óseos, 250 cadáveres, y solo dos cuerpos identificados. Estas son algunas de las cifras clave que documentan el horror de Colinas de Santa Fe; un cementerio ilegal que el crimen organizado usó para desaparecer a cientos de personas en Veracruz, y que a día de hoy es la mayor fosa clandestina de México en lo que va de sexenio.
[contextly_sidebar id=”bq2xgXnB15TaVOxPaqnXmgKFZkXWjyxp”]Pero más allá de los números, Animal Político viajó al Puerto de Veracruz para ponerle rostro a las mujeres que buscan a sus seres queridos a través del Colectivo Solecito, así como a las víctimas de desaparición forzada en un estado donde, a pesar de que la Policía Federal solo encontró seis fosas clandestinas en cuatro años, las organizaciones civiles hallaron cientos en apenas unos meses.
Y el resultado de esta cobertura es ‘Colinas de Santa Fe: buscando a un hijo desaparecido en México’; un mini-documental donde se entrelazan las historias de Griselda, Viridiana y Celia. Tres veracruzanas, “hermanas de un mismo dolor”, que narran cómo la desaparición de sus hijos las obligó a sacudirse el miedo, y a salir a escarbar la tierra con sus propias manos en busca de las respuestas que las autoridades no les dan.
Documental
A aquí puedes leer los perfiles de las madres del Colectivo Solecito:
Parte 1: “Los policías a los que pedimos ayuda secuestraron a mi hijo”
Parte 2: “Las madres no buscamos culpables, solo queremos encontrar a nuestros hijos”
Parte 3: “Las madres que buscamos a nuestros hijos en fosas somos hermanas de un mismo dolor”