En septiembre del año pasado el gobierno de Enrique Peña Nieto puso en marcha una nueva estrategia para revertir el alza de homicidios en el país.
[contextly_sidebar id=”dHJJTMbNPr8mLLc5bDOrgPYRK4ks5hE3″]Pero a seis meses de la aplicación de este plan los homicidios en 37 de estos 50 municipios no solo no se redujeron sino que se incrementaron y en algunos casos se han disparado incluso más de 200 por ciento. Hay otro municipio donde los crímenes se mantuvieron exactamente en el mismo nivel, y solo en 12 descendieron.
La estrategia se centró en estos 50 municipios pues según el gobierno el problema no era generalizado sino que esas localidades concentraban más del 40 por ciento de todos los asesinatos, y que era en ellos donde se trabajaría para disminuir los asesinatos.
Animal Político publicó el 1 de septiembre del año pasado, a partir de los datos de la Secretaría de Gobernación y el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, la lista de los 50 municipios en los que se aplicaría este plan y que, en efecto, acumulaban en ese momento el 44% de las averiguaciones por homicidio doloso en todo el país.
Los datos de incidencia delictiva oficiales actualizados al mes de febrero permiten hacer un nuevo balance del total de homicidios registrados en el primer semestre de 2016 ya con la nueva estrategia respecto al mismo periodo del año anterior.
En los primeros seis meses del nuevo plan – septiembre de 2016 a febrero de 2017 – los 50 municipios considerados prioritarios por el gabinete de seguridad acumularon 4,999 averiguaciones por el delito de homicidio doloso. Estas localidades en el mismo lapso de 2015 registraron tres mil 822.
Lo anterior significa que aun con el nuevo plan del gobierno los homicidios dolosos en estas 50 localidades crecieron 30.79% tan solo de un año a otro.
Los asesinatos repuntaron en 37 de los 50 municipios, por lo que las acciones para combatir la violencia solo lograron reducir los asesinatos en 1 de cada 4 de los municipios atendidos, es decir en el 25% de las localidades atendidas.
En ocho de los municipios el aumento fue mayor al 100% y en tres de ellos el alza incluso superó el 200 por ciento.
El caso más grave es el de Tecomán en Colima donde se registraron 134 casos de homicidio en los últimos seis meses, que equivalen a un incremento del 282% en comparación con los 35 homicidios dolosos del periodo anterior.
La violencia en este municipio se ha convertido en una noticia habitual. El pasado 12 de marzo se reportó el homicidio de dos personas baleadas con armas de alto poder, mientras que el 6 de marzo se registró un enfrentamiento a disparos a plena luz del día dejó el saldo de una persona muerta.
Chihuahua, la capital del estado del mismo nombre, es el segundo municipio de los enlistados como “prioritarios” con el mayor incremento de violencia. En los últimos seis meses se registraron 206 homicidios dolosos, esto es 232% más asesinatos respecto al mismo periodo anterior.
Estos datos confirman un deterioro en la seguridad en Chihuahua luego de que en los últimos años se había conseguido una tendencia a la baja en la violencia. A esto se suma Ciudad Juárez, otra localidad de la lista de 50, donde los asesinatos también registran un incremento superior al 155 por ciento.
El asesinato de la periodista Miroslava Breach quien fue baleada cuando salía de su casa en la capital de ese estado el pasado 23 de marzo, es otra muestra de la creciente violencia.
La capital de Tamaulipas, Ciudad Victoria, es el tercer municipio con el mayor aumento de homicidios: pasó de 35 casos entre septiembre de 2015 y febrero de 2016 a 105 asesinatos en los seis meses con el nuevo plan. Esto equivale a un incremento del 200 por ciento.
Después se ubica Mazatlán, Sinaloa donde los homicidios registraron un repunte del 159%, le sigue Ciudad Juárez. En todos los municipios referidos el común denominador es la presencia u operación de grupos de la delincuencia organizada.
En esta lista de 50 municipios de atención prioritaria aparecen cuatro delegaciones de la Ciudad de México. En tres subieron los asesinatos: Venustiano Carranza donde el incremento fue de 65% en este semestre; Iztapalapa con un alza de casi el 15% y Gustavo A. Madero con un repunte del 8.45 por ciento.
Solo en 12 del los 50 municipios prioritarios bajaron los homicidios tras seis meses del nuevo plan del gobierno, mientras que en Ecatepec en el Estado de México, el nivel de violencia se mantuvo exactamente igual, sin incremento pero tampoco sin reducciones.
Entre las localidades donde sí bajaron los asesinatos destaca el caso de Acapulco, Guerrero, la ciudad del país que acumulaba el mayor número de homicidios cuando arrancó la nueva estrategia. En estos seis meses se registraron 374 homicidios, una reducción del 14% respecto al periodo anterior.
En términos porcentuales la mayor reducción la registra Puebla con una baja del 35% en su nivel de homicidios en este semestre y después le sigue Monterrey con una caída del 32.5% en los asesinatos.
De las delegaciones de la Ciudad de México incluidas en la lista la única donde si hubo una reducción de los asesinatos fue Cuauhtémoc con una baja del 21.4 por ciento.
Los otros ocho municipios donde sí hubo una baja en los homicidios fueron Guadalajara y Zapopan, ambos en Jalisco, con un decremento del 11 y 10% respectivamente; Tecámac, Nezahualcóyotl, Chimalhuacán y Tlalnepantla en el Estado de México con bajas del 3 hasta el 26 por ciento.
La lista la completan el municipio de Chilapa de Álvarez en Guerrero con una reducción del 10.3% de las averiguaciones y carpetas de investigación por homicidio doloso y Torreón Coahuila en donde la reducción es del 13 por ciento.
Aunque el gobierno anunció públicamente que pondría en marcha una nueva estrategia en estos municipios, nunca detalló ni siquiera de forma general en que consistía.
El pasado 30 de enero Animal Político publicó un documento oficial obtenido vía transparencia donde se detallaban algunos puntos de esta estrategia,aunque la única acción concreta era el despliegue de “grupos de reacción mixtos” en los municipios encabezados por militares. Dicho plan no establecía ningún plazo para que se apreciaran resultados.
La investigadora de la organización Causa en Común, Marcela Figueroa, experta en temas de políticas públicas y seguridad, advirtió que este plan del gobierno de enfocarse solo en los 50 municipios que acumulaban más del 40 por ciento de los homicidios estaba mal desde su concepción.
“Se tomaron en cuenta los municipios con mayor número de homicidios. Eso provoca que en la lista de los 50 municipios más violentos estén las ciudades que tienen un mayor número de población, no en donde se concentran más los homicidios (…) no se incluye a ningún municipio de Veracruz por ejemplo, aunque en tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes varios municipios de este estado, como Coatzacoalcos y Boca del Río, rebasen a Iztapalapa que sí está en la lista” dijo.
Otro punto clave por el cual este plan del gobierno no funciona es porque se sigue sustentando en la “implementación de operativos”, generalmente con el Ejército a la cabeza, sin que haya realmente esquemas de mayor inteligencia, explica Figueroa.
“No hay un diagnóstico de la zona y por lo tanto sin ningún diseño de política pública de reducción de la violencia enfocada a la problemática de origen de la región, así como de fortalecimiento institucional de las autoridades civiles” subrayó.
En este contexto, y tras el incremento de homicidios registrado en el primer bimestre de este año, la investigadora consideró que 2017 podría terminar con más de 22 mil homicidios, en un nivel de violencia similar al del año 2011 pero con la agravante de que los homicidios se ha extendido hasta ahora 23 estados del país.