El voto de las minorías no fue suficiente. Aunque Hillary Clinton ganó entre los hispanos, afromericanos o asiáticos que votaron este martes por el presidente número 45 de Estados Unidos, el apoyo de los blancos fue suficiente para que Donald Trump se alzara con la victoria.
[contextly_sidebar id=”JZZxcFsvEUXoTivb51ZA89PfbPptaFA5″]El 58% de los blancos estadounidenses votaron por el republicano y sólo el 37% por Hillary Clinton, según datos demográficos de las encuestas de salida.
Desde los más jóvenes (18 a 29 años) hasta los ancianos (más de 65 años): todos los grupos blancos votaron por Donald Trump.
El republicano no ganó entre ningún grupo de edad de las minorías; los datos muestran que Clinton se llevó el apoyo de los jóvenes y adultos hispanos, afroamericanos y asiáticos.
Un día después de la votación, las proyecciones indicaban que al menos 8 de cada 10 afroamericanos habían elegido a la demócrata; así como 65% de los latinos y 65% de los asiáticos.
Las minorías votaron contra el discurso intolerante que caracterizó a Donald Trump durante la campaña, pero el mensaje contra el multiculturalismo de Estados Unidos los venció.
¿Y las mujeres?
Entre los blancos en Estados Unidos que eligieron a Trump también están las mujeres.
Aunque el republicano fue señalado por misógino y machista tras hacer distintos comentarios negativos contra las mujeres o incluso decir abiertamente que la fama le permitía hacer con ellas lo que fuera, la mayoría de las mujeres blancas (53%) votaron por Trump.
Entre las votantes blancas que se dijeron conservadoras, el 78% votó por el republicano; entre las que se declararon protestantes, el 64%.
Las mujeres de otros grupos raciales se quedaron con Hillary Clinton.
Sin estudios universitarios
Desde las primeras encuestas en campaña destacó que el voto duro de Trump se concentró en los estadounidenses sin título universitario. Los primeros datos de la votación de este martes, lo confirman.
La mayoría de los votantes graduados de la universidad votaron por Hillary Clinton (49%). Trump obtuvo el 42% de esos votos.
Si se trata de estudios de postgrado, Clinton se quedó con el 58% del apoyo contra 37% que acumuló Trump.
Entre los votantes blancos sin título universitario las diferencias se amplían. Entre ellos, el republicano y ahora presidente electo se quedó con casi 7 de cada 10 votos, entre los que se encuentran el 62% de las mujeres blancas que no fueron a la universidad.
En contraste, el 71% de los integrantes de minorías con título universitario votaron por Hillary.
¿Y entre los independientes?
Los analistas estadounidenses se concentraron durante la campaña en el voto indeciso y de los independientes; diciendo que éstos definirían la elección.
Según los primeros datos, el voto independiente favoreció a Donald Trump con el 48% del apoyo contra el 41% para Clinton.
Entre los 10 estados de la Unión Americana que se consideraban clave en la elección, el republicano ganó al menos siete de ellos: Arizona, Iowa, Missouri, Carolina del Norte, Pennsylvania, Ohio y Florida.
Pennsylvania se preveía como una de las grandes sorpresas, un estado con tradición demócrata en donde año a año se perdía apoyo por las pérdidas económicas de una zona industrial y que finalmente quedó en manos de Trump.
Florida y Ohio, los históricamente más disputados —y con 29 y 18 votos electorales, respectivamente— también votaron por el republicano.
Los republicanos leales y los religiosos
La mayoría de quienes practican una religión también eligieron a Donald Trump: protestantes (60%), católicos (52%), mormones (61%) y cristianos (55%).
La candidata demócrata se quedó con los estadounidenses sin religión (68%) y los judíos (73%).
Finalmente están los republicanos. Tras los escándalos de Trump haciendo comentarios misóginos y acumulando acusaciones por presunto abuso sexual, distintos políticos republicanos dijeron públicamente que quitarían su apoyo al candidato.
Mucho se habló de cuánto podría restar al voto final de Donald Trump esta falta de apoyo a la que se sumaron personajes como el excandidato presidencial John McCain o la exsecretaria de Estado, Condolezza Rice.
Los datos, un día después de la elección, muestran que poco: 9 de cada 10 republicanos votó por Donald Trump, la misma proporción entre hombres y mujeres.