Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara que salió de prisión en 2013, dijo en una entrevista publicada este domingo 24 de julio que ya no es narcotraficante, y que no tiene una guerra o confrontación con Joaquín el Chapo Guzmán.
[contextly_sidebar id=”bbxKPCS9t4ZLmKc6ByUgL0cLtqNjn1Of”]”Yo no tengo problema con ningún cártel… yo no estoy relacionado con ningún problema de esta índole y menos estoy involucrado en una guerra”, respondió a la periodista Anabel Hernández, al ser cuestionado sobre los reportes de que hizo una alianza con los Beltrán Leyva, y estuvo detrás de un ataque en contra de la casa de Consuelo Loera, madre del Chapo.
“Lo único que busco es paz y le pido perdón a la sociedad de México por los errores que cometí… yo dejé de ser narcotraficante desde el 84. ¡Jamás lo voy a volver a ser! ¡Yo no quiero saber absolutamente nada del narcotráfico!”, agregó “desde la clandestinidad” en algún lugar del norte de México, según se lee en la revista.
La entrevista, apuntó Proceso, fue grabada en video -sin especificar en qué sitio-, y podrá verse a partir del lunes 25 de julio, a las 12:00 horas.
Caro Quintero, de 63 años, es uno de los personajes que dio origen a los grandes cárteles del narcotráfico en México, e incluso llegó a ser conocido como el Narco de Narcos.
Fundó el llamado Cártel de Guadalajara junto con su amigo y compadre Miguel Ángel Félix Gallardoy Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto.
Lo detuvieron en Costa Rica el 4 de abril de 1985, a petición de las autoridades mexicanas, al ser relacionado con el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar.
Esto hasta que en agosto de 2013 un tribunal federal en Jalisco le concediera un amparo, y saliera de la cárcel.
La Procuraduría General de la República (PGR), en ese entonces bajo el mando de Jesús Murillo Karam, calificó de “ridículos” los argumentos judiciales con los que quedó libre, aunque en su momento no se activó un operativo para impedir su salida o dar seguimiento a su ubicación.
La DEA ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por información que lleve a su recaptura.
En la entrevista, Quintero negó haber organizado el secuestro y asesinato del agente Camarena. Según él, solo estuvo en el lugar equivocado.
“Yo estuve en esa casa (donde Camarena fue retenido y ultimado) porque me mandaron llamar. Fonseca y yo teníamos un rancho en sociedad. Entonces, para ir por un dinero para comprar algunas pasturas y un camión, por eso fui yo a ese lugar… le pido perdón al gobierno de Estados Unidos si en algo participé o si en algo estoy involucrado”, se lee en la revista Proceso.
“Le pido perdón al gobierno de Estados Unidos, a la DEA y a la familia Camarena También, estoy muy arrepentido, y si cometí algún error pido perdón. Yo ya pagué mi delito”, agregó Quintero.
En otro punto de su charla con Hernández, Quintero opinó que la legalización de la marihuana “no es un camino”, que le diría a la juventud que “no use la droga”, y que ya no es “un peligro ni para la sociedad de México ni para el gobierno”.
Cuestionado sobre qué le diría al presidente Peña Nieto, respondió: “Que todos merecemos una segunda oportunidad, que me ayude, que quiero vivir en paz”.
Caro Quintero dio una entrevista pic.twitter.com/o0Ci2qEydP
— Daen (@ArturoDaen) 24 de julio de 2016