El narcotraficante Joaquín el Chapo Guzmán fue trasladado al “ala de máxima seguridad” del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 9 en Ciudad Juárez, Chihuahua, ya que en la cárcel del Altiplano, donde había permanecido desde su recaptura el 8 de enero pasado, se realizan “distintas obras” para reforzar la seguridad.
La Secretaría de Gobernación (Segob), en un comunicado, detalló la razón del traslado en un boletín. Antes, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) solo informó que el movimiento se había dado como parte de un protocolo y una estrategia de seguridad.
“Dicho traslado se realizó con pleno apego a los Derechos Humanos del interno y obedece estrictamente a la política penitenciaria federal que forma parte de los protocolos de seguridad”, explicó la CNS, en un comunicado.
“Se informa, también, que el referido traslado ha sido oportunamente comunicado a los distintos jueces de amparo y en materia de procesos penales federales para la continuación debida de las causas penales y juicios de amparo correspondientes. Como parte de la estrategia de seguridad implementada de septiembre a la fecha, se han rotado a más de 7 mil 400 internos en todo el país”, agregó.
Las autoridades no especificaron que el traslado tuviera entre sus objetivos avanzar en la extradición del narcotraficante a Estados Unidos.
El abogado José Refugio Rodríguez dijo a Animal Político que el órgano de reclusorios violó las suspensiones provisionales que impedían el traslado de Guzmán Loera a otro penal.
Afirmó que esta misma tarde buscaría reunirse con Guzmán Loera en el penal de Ciudad Juárez, para afinar la estrategia y solicitar a la Secretaría de Gobernación y a la CNS que el Chapo sea regresado al penal del Altiplano en el Estado de México.
Rodríguez asegura que existen dos amparos producto de los procesos contra la extradición, en los cuales se ordenó no trasladar al Chapo en tanto no se resolvieran los procesos solicitados por Estados Unidos.
De acuerdo al abogado de Guzmán Loera, el juzgado tercero de distrito en el Estado de México emitió una opinión jurídica, indicando que es procedente la extradición del narcotraficante a Estados Unidos. La opinión, mencionó, será enviada a la Secretaría de Relaciones Exteriores, para que la integre en el proceso.
Se esperaba que el abogado Andrés Granados solicitara este sábado a las autoridades penitenciarias del penal federal en Ciudad Juárez una reunión con el Chapo Guzmán, para que esté le dé indicaciones sobre la parte legal.
[contextly_sidebar id=”tx8kVHlQtI7ViTaE9ulz7AGGpx5c89wP”]Guzmán había permanecido en la prisión de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, desde su detención el pasado 8 de enero.
La familia de Guzmán indicó a Animal Político que fue informada en la madrugada del traslado, y hace unos minutos les notificaron que ya está en Ciudad Juárez. Con el traslado tendrán que hacer de nuevo trámites, para poder ingresar a verlo, mencionaron sus familiares.
De acuerdo con el diario Reforma, elementos de la Policía Federal y del Ejército mexicano desplegaron un operativo especial de vigilancia en el Cefereso de Ciudad Juárez, por el traslado del líder del cártel de Sinaloa.
En el Cefereso, desde la madrugada, Guzmán permanece en un área de cuidados especiales. Hace un par de años, en marzo de 2014, las autoridades detuvieron a quien era director del Cefereso 9 en Ciudad Juárez, José Luis Armas Cuevas, con la acusación de que había colaborado en una fuga de reos.
Según el diagnóstico penitenciario de la CNDH (2015), en el Cefereso 9 de Ciudad Juárez hay sobrepoblación de reos.
El pasado 4 de mayo Eduardo Guerrero, titular del área de Prevención y Readaptación Social, informó que por una falla eléctrica en un tablero de la cárcel del Altiplano se había impedido a Guzmán Loera una visita de familiares y de sus abogados, siguiendo el protocolo de seguridad.
La falla, según Guerrero, no solo afectó a Guzmán, y tanto en su caso como en el de otros reos se dio una reprogramación de sus visitas.
El 11 de julio de 2015, por un túnel en su celda, Guzmán escapó de la cárcel del Altiplano, y estuvo prófugo durante seis meses.
Guzmán Loera es originario de Badiraguato, Sinaloa. Desde finales de la década de los 80 se convirtió en uno de los principales líderes del Cártel de Sinaloa e impulsó su expansión sobre organizaciones rivales como el Cártel de Juárez o el Cártel de Tijuana.
Su primera detención, ocurrió el 9 de junio de 1993, en la frontera de Guatemala y México. El capo fue trasladado al penal federal del Altiplano y posteriormente al de Puente Grande, Jalisco, donde permaneció hasta el 18 de enero del 2001, cuando consiguió escapar en un carro de lavandería.