[contextly_sidebar id=”AQi5av4lugnUnpSWaOwJZp2WdKRCw0Vf”]El abogado y activista social Rodolfo Zapata Carrillo fue asesinado este lunes 2 de noviembre en Coatzacoalcos, Veracruz. Fue atacado por cuatro personas con el rostro cubierto, quienes le dispararon desde un automóvil.
De acuerdo con testigos, se escucharon al menos nueve disparos. Dos le perforaron la pierna derecha y otros más el abdomen.
Entre las últimas acciones de activismo social que realizó Zapata se encuentra la movilización que encabezó el pasado 7 de octubre, donde pidió la renuncia del secretario de Seguridad Pública del estado, Arturo Bermúdez Zurita, y del coordinador del Mando Unico Policial de Coatzacoalcos, Luis Enrique Barrios.
Esto ante los elevados índices de inseguridad en el antiguo Puerto México, mismos que se mantienen aún cuando supuestamente se implementó un operativo para reducirlos: “Queremos que las autoridades sepan que no estamos de acuerdo en cómo se está llevando este modelo de seguridad, que no está funcionando y que ha sido rebasado por la inseguridad en la región”, expresó.
A finales de octubre participó en la Mesa de Seguridad organizada por el Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos, a la cual concurrieron el fiscal Luis Ángel Bravo Contreras y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Arturo Bermúdez, donde criticó la falta de resultados y exigió más vigilancia ante el incremento al robo de vivienda, coches y a peatones.
Antes del homicidio, el abogado fue víctima de la delincuencia en varias ocasiones. El 10 de octubre pasado, tres días después de que encabezó la marcha, un hombre rompió los cristales de su camioneta y sustrajo varios objetos, entre ellos su computadora; el vehículo se encontraba en el domicilio del activista. El abogado se enfrentó al delincuente y logró detenerlo y entregarlo a las autoridades judiciales, pero fue liberado posteriormente.
El 19 de octubre, el mismo individuo reintentó el robo al romper nuevamente uno de los cristales de la camioneta, pero volvió a ser capturado. En esa ocasión fue consignado y recibió un recurso de formal prisión.
Después de su visita a México, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) refiere en su anexo denominado ‘Observaciones Preliminares’ que “la violencia contra familiares de víctimas, defensores y defensoras de derechos humanos, y contra periodistas es ejercida con el objetivo de silenciar las denuncias y el reclamo de verdad y justicia y perpetuar la impunidad para las graves violaciones a los derechos humanos. La violencia y el amedrentamiento busca acallar las voces que más necesita México”, asienta la CIDH.