[contextly_sidebar id=”hopkVvdtqtCnpph3pmwxFLDajEu9haLh”]El gobernador de Veracruz, Javier Duarte, aseguró que se hizo un juicio “a priori” contra su persona por el caso del multihomicidio en la colonia Narvarte, en el Distrito Federal. “Si fuera solamente un ciudadano (…) no tendría mayor agravio, ya que tengo claro en mi conciencia que no tengo nada que ver en este caso, ni lo hice ni lo mandé a hacer (…) Sin embargo, soy el gobernador de Veracruz y represento la honorabilidad de toda una sociedad, y eso sí me agravia”.
Durante su conferencia de prensa semanal, Duarte dijo que desde el inicio del caso hubo un “linchamiento público” contra su persona en el que participaron escritores e intelectuales.
“Por más legítimas que sean las causas, por más justas y transparentes que parecieran ser las banderas que algunos enarbolan, cuando no se tiene la razón, simplemente no se tiene”, dijo el gobernador de Veracruz.
Según Duarte, el avance de las investigaciones que desarrolla la Procuraduría General de Justicia del DF en el caso Narvarte –el asesinato de cinco personas en un departamento, entre ellas el fotorreportero Rubén Espinosa y la activista y promotora cultural Nadia Vera- muestra que se hizo un juicio a priori contra su persona, y destacó que “poco a poco los hechos van esclareciéndose y va saliendo la verdad a la luz pública”.
Hasta el momento van dos personas detenidas por el multihomicidio en la Narvarte. Uno de ellos es un expolicía de 24 años de edad que en 2011 fue sentenciado por tortura y ejercicio indebido del servicio público a 4 años y ocho meses de cárcel, sin embargo, salió un año después. El primer detenido no reconoció ni confesó haber participado en ningún hecho delictivo en dicho departamento de la Narvarte.
Duarte destacó que es el primer gobernador en acudir a rendir una declaración ministerial ante una autoridad de una administración local, es decir, del Distrito Federal.
“Lo hice porque tengo la conciencia limpia, porque no tengo nada que ocultar, porque soy un hombre de bien y que todos los días trabajo con determinación y mucha energía a favor de la sociedad a la que represento”, afirmó.
Además, Duarte dijo que este caso “nos deja un claro precedente: que antes de emitir cualquier señalamiento y hacer campañas donde prácticamente se está sentenciando una culpabilidad, primero hay que esperar a que se esclarezcan los hechos, situación que poco a poco se viene dando por una instancia distinta al gobierno de Veracruz”.
Rubén Espinosa, el fotorreportero que huyó de Veracruz
Espinosa ya había dicho en numerosas ocasiones que había recibido presiones durante años mientras realizaba coberturas en Veracruz. Que le habían borrado tarjetas de memoria de su cámara y se le había pedido que dejara de tomar fotos de situaciones como la detención de estudiantes durante una manifestación en 2012. Ese mismo año, Regina Martínez, otra reportera de Proceso, una revista que se caracteriza por su periodismo de investigación, fue asesinada. Las autoridades nunca contemplaron que su trabajo como periodista de investigación pudo ser el motivo de la muerte, que achacaron a un robo.
Espinosa había dicho que un funcionario del gobierno llegó a espetarle una vez: “Deja de tomar fotos si no quieres acabar como Regina”.
En otra ocasión, según contó la revista Proceso, Espinosa acusó al gobernador Duarte de ofrecerle dinero para que retirase una denuncia que había puesto contra la policía después que varios agentes le golpeasen.
Espinosa dejó Xalapa, la capital del estado de Veracruz en junio. Explicó que había personas siguiéndole, molestándole y tomándole fotos afrente a su casa. Pocos días antes había participado en la colocación de una placa en una Plaza de Xalapa a la que renombraron como “Plaza Regina Martínez” en protesta por la manera en la que gobierno manejó el caso.