Esta nota es parte de la investigación Se busca fuero, en la que Animal Político encontró a nueve candidatos a una diputación federal amparados ante la posible responsabilidad en algún delito y de cuyas consecuencias podrían librarse si ganan una curul.
[contextly_sidebar id=”gde65XFmhZ2MUXMNDZAz2zFf914eiJke”]El excomisario ejidal Josué Nivardo Mena Villanueva es acusado de fraude por la venta de una parcela por 4.5 millones de pesos de la isla Holbox, de Quintana Roo, un área natural protegida donde se prevé la construcción de un proyecto turístico exclusivo. Ahora es candidato del Partido Encuentro Social para la diputación federal del distrito 1 Solidaridad, QuintanaRoo.
El supuesto fraude ocurrió cuando la madre del candidato, Fátima Eurípides Villanueva Moguel, vendió el título de su parcela, de 45 mil metros cuadrados (aproximadamente unos 7 campos de futbol) a un empresario en 2010. Pero dos días después de la transacción, la mujer cedió el “derecho agrario” de ese terreno, (derecho a áreas de uso común de la isla por ser propietario), en favor de su hijo Nivardo Mena.
El empresario demandó a ambos en 2010 y el proceso aún continúa. En entrevista, el candidato asegura que la acusación “no tiene sustento” porque nunca firmó nada. Explica que la venta fue por “el título de parcela”, pero no del “derecho agrario”.
Según Mena, los 70 pobladores que vendieron sus parcelas, incluyendo a su madre, están conformes con la transacción, pero el trato no incluyó “el derecho agrario”, es decir, las terrenos de uso común que le corresponde a los ejidatarios de manera proporcional y que también pueden venderse o rentarse.
Sin embargo, acusa Mena, la empresa que compró las parcelas, intenta hacer valer la compra de esas zonas comunes por medio de “asambleas ejidales y actas apócrifas” en las que los ejidatarios han cedido sus derechos agrarios.
Los conflictos legales de los ejidatarios que vendieron y los 40 que aún no lo hacen, han impedido que se concrete el proyecto en la isla de 155 mil hectáreas, donde buscan construir villas, hoteles, plazas comerciales y un puerto.
Nivardo Mena, quien renunció al PT porque descubrió que los dirigentes “manejan doble moral”, asegura que busca un cargo de representación popular con la conciencia tranquila. “No temo, no debo nada y lo que haya que responder aquí estoy”. Su primera propuesta, dice, es quitar el fuero a los legisladores para que “todos seamos juzgados de acuerdo a nuestras obras”.