[contextly_sidebar id=”FY1UQ5FiseKZAlG2CN1Q7IuDzmLZt5fs”]Con tan sólo 15 oficiales para entrevistar, caso por caso, a miles de personas que huyen de sus lugares de origen con el objetivo de buscar protección en México, un presupuesto de apenas 25 millones de pesos, y únicamente tres oficinas en toda la República, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) recibió el año pasado más de dos mil solicitudes de refugio.
Esta cifra supone un aumento de hasta 67% en comparación con 2013, año en el que la COMAR recibió un total de mil 196 solicitudes.
Así lo señaló la directora de Atención y Vinculación Institucional de la COMAR, Cinthia Pérez Trejo, durante la celebración ayer de un taller para periodistas sobre Protección Internacional de los Refugiados, en el que también participaron integrantes de ACNUR México y de la organización civil Sin Fronteras.
Durante el evento realizado en el Museo de Memoria y Tolerancia de la Ciudad de México, Pérez Trejo apuntó que del total de las “más de dos mil” peticiones de refugio recibidas en 2014 –la funcionaria no supo especificar la cifra exacta-, el 36% no fueron resueltas por abandono o desistimiento del solicitante, cifra que refleja un descenso en este apartado en relación a 2013, cuando el 42% de los personas abandonaron la petición por diferentes motivos.
Del resto de solicitudes que sí fueron resueltas por la COMAR, el 40% recibió la protección internacional, mientras que el resto, un 60%, no obtuvo el reconocimiento de refugiado.
Por nacionalidades, la funcionaria especificó que en 2014 las personas originarias de Honduras, El Salvador, Guatemala, Venezuela, y Colombia, fueron las que más obtuvieron el reconocimiento de la condición de refugiados en México.
Por otra parte, ante el aumento progresivo de peticiones de refugio que México recibe cada año –de 2009 a 2014 las solicitudes aumentaron 194%-, Animal Político cuestionó a Jesús Manuel Sierra, subdirector de Asuntos Jurídicos y Transparencia de la COMAR, cuántos integrantes de este organismo desconcentrado dependiente de la Segob llevan a cabo las entrevistas de las que depende en gran medida que miles de solicitantes reciban o no la protección del estado mexicano.
Sierra, quien también participó en el taller sobre Protección Internacional de los Refugiados, contestó que un total de 15 integrantes de COMAR “en todo el país” son los encargados de hacer las entrevistas.
-¿No es un número muy pequeño para tantas solicitudes de refugio? –se volvió a preguntar al funcionario-.
-Sí, es un número pequeño. Pero hay un compromiso de parte de estas personas que hacen las entrevistas (a los solicitantes de refugio) a hacer un buen trabajo-, recalcó el subdirector de Asuntos Jurídicos y Transparencia de la COMAR.
Falta de personal en la COMAR se refleja en bajo número de solicitudes admitidas: Sin Fronteras
Cabe recordar que el pasado 31 de octubre de 2014, con motivo de la conmemoración de los 30 años de la Iniciativa Cartagena, la directora de la organización civil Sin Fronteras, Nancy Pérez, ya apuntó la “falta de personal y de infraestructura en la COMAR” como una de las principales trabas que enfrentan los solicitantes de refugio en México.
En una entrevista que publicó Animal Político, Pérez hizo hincapié en que la COMAR sólo tiene tres oficinas en el país: en Tapachula (Chiapas), Acayucan (Veracruz), y en la Ciudad de México.
“Sin duda, el personal que tiene la COMAR es insuficiente para la atención a este grupo de población (que busca refugio), y eso se ve reflejado en el bajo número de solicitudes admitidas”, expuso Pérez, quién subrayó que además de que la COMAR tiene poca infraestructura, ésta se concentra en la capital del país, lo que obliga a los solicitantes que están en el interior de la República a desplazarse hasta el DF para poder resolver su situación.
Lee aquí la nota: Estas son las principales trabas que México pone a los migrantes que buscan refugio en el país