[contextly_sidebar id=”r7vZDAsVRbyZ4V13mprfDy3TToMaBYna”]La jornada de votación del domingo dejó 115 averiguaciones previas, 59 detenidos y mas de mil denuncias en todo el país por delitos que van desde la compra de votos, pasando por el robo de boletas, hasta la destrucción de casillas completas.
Pese a ello, el boicot anunciado en días previos en contra de los comicios no se materializó pues la mayoría de las personas que quisieron hacerlo, pudieron emitir su voto incluso en los estados considerados como focos rojos.
El gobierno federal realizó un gran despliegue del Ejército, la Marina y la Policía Federal sobre todo en los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán, y realizó patrullajes tanto aéreos como terrestres en las zonas más conflictivas, pero el presidente Enrique Peña Nieto subrayó que los incidentes fueron “aislados”.
Este domingo por la tarde, el líder nacional del PRD, Carlos Navarrete, destacó que los mexicanos vencieron los llamados a no votar; dijo que de 148 mil casillas, sólo dejaron de instalarse 427, de acuerdo con el INE.
“Esto es una gran noticia (…) confirma que eran muchísimos más los millones de mexicanos que querían expresar”, agregó.
En Yucatán la violencia cobró dos vidas en un supuesto enfrentamiento entre panistas y priistas. Al respecto, el dirigente estatal del PRI rechazó estas acciones y llamó a que los ciudadanos salieran a votar y no se sintieran intimidados.
El Partido Revolucionario Institucional rechaza las acciones del Partido Acción Nacional en distintos municipios. pic.twitter.com/M7Jlq966eD
— Carlos Pavon Flores (@carlospavonf) June 7, 2015
En Chiapas, Oaxaca, Guerrero hubo quema de boletas, urnas de votación y diferente material electoral, y se registraron protestas de quienes llamaban al boicot. Asimismo, hubo enfrentamientos esporádicos que concluyeron con la detención de 88 personas en Oaxaca y 11 en Chiapas, informaron sus respectivas fiscalías
El secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, apuntó como el incidente más “complicado” ocurrió en el municipio de Tixtla, en Guerrero, donde estudiantes, maestros y padres de los 43 alumnos de magisterio desaparecidos en septiembre en ese estado –cuya escuela está en este municipio– se acercaron a las mesas de votación e intentaron convencer a los funcionarios para que les entregaran las boletas, que después quemaron como forma de protesta.
Poco después se registró un enfrentamiento con palos y piedras entre los manifestantes que llamaban al boicot, muchos con la cara cubierta con pasamontañas, y alrededor de un millar de personas que dijeron se oponían al boicot y deseaban defender su derecho al voto.
También en Guerrero, pero en Chilpancingo, se reportó que un grupo prendió fuego a una camioneta en la zona cercana al Congreso e Instituto Electoral de Chilpancingo; después de esto, el grupo huyó. No se reportaron heridos.
Asimismo, en Michoacán, estudiantes de diferentes escuelas normales incendiaron la noche del domingo dos vehículos. El primer hecho violento se registró minutos antes de las 21 horas sobre la carretera libre Uruapan-Paracho a la altura de la salida a Los Reyes; el segundo incidente ocurrió en Cherán, donde estudiantes estacionaron un auto frente a una gasolinera, le rompieron los vidrios y le prendieron fuego.
Dado que en dos de 11 distritos electorales de Oaxaca no se instalaron 20 por ciento de las casillas, se perfiló que esto fuera un posible motivo de anulación; no obstante, en sesión extraordinaria del INE el consejero Benito Nacif afirmó que este hecho es una afectación ‘no significativa’, por lo que se prevé que la anulación no proceda.
En los actos de boicot más violentos participaron también miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el sindicato de maestros que se opone a la reforma educativa del gobierno y presente sobre todo en los estados del suroeste.
En Oaxaca, miembros de este grupo, todos con la cara cubierta o con máscaras de Anonimus, vaciaron un camión con papelería electoral, boletas, urnas y mesas de votaciones en pleno zócalo y lo prendieron fuego.
Mientras, en las afueras de esta ciudad colonial, esperaban unos 50 vehículos militares pesados listos para intervenir ante cualquier incidencia y un helicóptero de la marina sobrevolaba la zona.
Hechos similares se repitieron en varios puntos de Oaxaca y Chiapas mientras en el resto del país predominaba la calma.
El presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, en un primer balance de la jornada aseguró que las elecciones se celebran “con normalidad” en “todos los estados de la república”, que los mexicanos podían ir a votar con “seguridad” y que los incidentes eran mínimos ya que se pudieron instalar el 99,95% de las mesas de votación.
Las elecciones intermedias suelen atraer poca atención, pero en esta ocasión ha sido distinto por los llamados previos a boicotear y diversos hechos de violencia previos.
Con información de AP, Notimex, Carlos Arrieta (corresponsal) y Arturo Ángel.