[contextly_sidebar id=”QiLopH89VVJedN5pLTSBLWdZz6I19gra”]Para la organización Amnistía Internacional (AI), las autoridades mexicanas han intentado deslegitimar las denuncias de los familiares de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, y la Procuraduría General de la República (PGR) ha fallado en investigar la participación de las fuerzas armadas y otras autoridades en la desaparición forzada de los jóvenes.
“En medio de las preocupaciones sobre la posible complicidad de las autoridades locales y del ejército, es aún más importante que cada línea de investigación se explore a fondo y que no se deja piedra sin remover”, dijo Erika Guevara Rosas, directora Regional para las Américas de Amnistía Internacional, de acuerdo con un comunicado difundido por el grupo.
“Tenemos una lista de preocupaciones sobre la forma en que la investigación se ha ejecutado y si toda la gama de estos crímenes, incluyendo la desaparición forzada y el asesinato de seis personas cuando los estudiantes fueron atacados, se han abordado plenamente”, agregó.
Estos señalamientos ocurren mientras los padres de los 43 estudiantes, que fueron atacados por policías municipales de Iguala y Cocula, exigen a las autoridades entrar a los cuarteles del Ejército mexicano para buscar a los jóvenes, ya que han señalado que soldados participaron en los hechos ocurridos el 26 de septiembre pasado.
Hasta el momento, las autoridades sólo les han permitido el acceso al cuartel de Iguala, Guerrero. Sin embargo, no hay precisado fechas.
El 20 de enero pasado, la PGR informó que recibió un informe del Instituto de Medicina Forense de la Universidad de Innsbruck, en Austria, en el cual los expertos reportaron que fue imposible identificar el perfil genético de las 16 muestras de restos humanos enviadas, debido a que el calor destruyó el ADN y el ADN mitocondrial.
La dependencia detalló que pidió a los científicos realizar una última prueba: Secuenciación Masivamente Paralela, que serían la última opción para identificar los restos. Hasta el momento, las autoridades sólo han confirmado que uno de ellos pertenece al estudiante Alexander Mora Venancio.
Más de 100 mil personas han sido asesinadas en México desde la “guerra contra las drogas” que se inició en 2006; al menos 23 mil personas están desaparecidas, según datos oficiales. Miles de comunidades han sido desplazadas por la violencia creciente y Amnistía Internacional continúa recibiendo informes de violaciones de derechos humanos cometidas por la policía y las fuerzas de seguridad, incluidas detenciones arbitrarias, tortura y desapariciones forzadas, detalló el grupo.