[contextly_sidebar id=”cBnOVSkkMYWCtpDJwjR3DcG9JNDuUzX1″]En la estrategia para rescatar Guerrero, que anunció el presidente Enrique Peña Nieto el 4 de diciembre pasado, se repiten algunos de los programas que presentó un año antes en el Plan para la recuperación de la entidad, tras el paso del huracán Manuel.
En ambos casos, el gobierno federal argumenta que el objetivo es impulsar el crecimiento económico y el desarrollo de la región.
En el Plan Nuevo Guerrero, presentado en noviembre de 2013 e incluido en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2014, se han invertido 37 mil millones de pesos y, aunque la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) presenta un desglose —hasta septiembre pasado— sobre cuánto ha gastado cada instancia de gobierno involucrada, no hay un reporte de resultados.
Un año después, el gobierno federal anunció la ampliación del plan, aunque algunos de los programas ya existen y recibieron recursos.
El jueves pasado, Peña Nieto anunció que con la “estrategia emergente para la reactivación económica” del Plan Nuevo Guerrero se pondría en operación un programa de empleo temporal, a cargo de las secretarías de Desarrollo Social, Comunicaciones y Transportes y la de Medio Ambiente y Recursos Naturales, para beneficiar a 130 mil familias guerrerenses.
Sin embargo, ese programa ya está en marcha y a lo largo de este año se entregaron 203 millones de pesos a esas tres secretarías de Estado.
Otro punto clave de la nueva estrategia es la promoción turística, especialmente de Acapulco.
Éste también fue pieza fundamental del Plan de hace un año y para ello se entregaron 72 millones de pesos a la Secretaría de Turismo para campañas nacionales e internacionales, eventos, ferias y relaciones públicas.
Lo que Peña Nieto llamó una “estrategia emergente para la reactivación económica” se presentó tras la crisis que implicó para la entidad la desaparición de los 43 normalistas de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, ocurrida en Iguala en septiembre pasado, y las consecuentes manifestaciones en diferentes municipios de la entidad para exigir su presentación con vida.
La visita del presidente a la entidad para presentar esta estrategia ocurrió 13 meses después de que se echo a andar el Plan Nuevo Guerrero.
Éste último, según el mismo Peña Nieto, promovería “el desarrollo estatal integral”, por lo que además de enfocarse en la reconstrucción tras el paso del huracán Manuel, que dejó 100 muertos en la entidad y pérdidas por 5,000 millones de pesos en carreteras y viviendas, se busco atender problemas de seguridad y violencia.
Por ejemplo, en 2014, en Guerrero se invirtieron 80 millones de pesos en el “fortalecimiento de las instituciones de seguridad pública en materia de mando policial” y otros 149.6 millones de pesos en implementar el Programa Nacional de Prevención del Delito.
Pese a esta inversión de 229.6 millones de pesos en fortalecer cuerpos policiales y prevenir el delito, las cifras oficiales muestran que Guerrero está entre las cinco entidades del país con el mayor número de homicidios dolosos; además de que tras la desaparición de los 43 normalistas se confirmó la intromisión del crimen organizado en policías municipales.
Plan Nuevo Guerrero, un año después
Según el reporte de la Secretaría de Hacienda, el monto autorizado para invertir en la entidad para la reconstrucción de infraestructura afectada por el huracán Manuel y el impulso económico y social del estado fue de 40,833 millones de pesos.
Lo anterior, incluye el Fondo Guerrero —una partida extraordinaria que autorizaron los diputados por 7,000 millones de pesos— más lo del Fondo de Desastres Naturales y las partidas federales.
Hasta septiembre pasado, Hacienda sólo reporta el gasto en obras y programas por 15,515.6 millones de pesos de los 37,715 millones aprobados para inversión.
De éstas, destaca que la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas ha recibido 850 millones de pesos, sin haber reportado un proyecto con descripción y objetivos. Tampoco existe un informe de resultados o ejercicio del monto.