[contextly_sidebar id=”gqwOKtUCfihWGiwmuFB9EtbiF5egiklL”]Muchos en México se han molestado por la forma como la cantante estadounidense Miley Cyrus utilizó este martes la bandera nacional en un concierto, y que motivó una investigación de las autoridades. Pero ciertamente no es la primera controversia que protagoniza un artista en el país.La banda de rock U2, los cantantes Madonna y Marilyn Manson así como presentadores de televisión como Cristina Saralegui o Laura Bozzo han causado polémica en distintos momentos.
Otros artistas mexicanos también han protagonizado escándalos, e incluso algunos han ocupado los primeros sitios de críticas en redes sociales como Twitter.
Regla estricta
“Ya en otros países por la apología de vicios y desviaciones, han decidido no permitir la presentación del espectáculo“: Protesta por la primera presentación de Madonna en México.
La actual controversia con Miley Cyrus empezó el martes. En el primer concierto de su gira por México, realizado en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, la cantante estadunidense permitió que uno de sus bailarines la golpeara con la bandera en un falso trasero.
La Secretaría de Gobernación inició una investigación pues en el espectáculo se pudo haber violado el artículo 56 de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales.
Se trata de una legislación que establece reglas estrictas sobre la forma como se utilizan los símbolos patrios, como la bandera, que en casi todos los casos está regulada por Gobernación.
De acuerdo con la ley las personas que utilicen este símbolo están obligadas a guardarle respeto, así como a tener cuidado “en su manejo y pulcritud”.
Quienes no cumplan con estas disposiciones pueden ser sujetos de sanciones, según la gravedad del caso. La legislación establece una multa de entre US$1.200 y US$5.100, o el encarcelamiento por 36 horas.
El escándalo de Cyrus recuerda otras controversias protagonizadas por artistas famosos en México en los últimos años. BBC Mundo les presenta algunos de los casos más sonados.
U2: desencuentro presidencial
El dos de diciembre de 1997 la banda irlandesa de rock U2 se presentó por primera vez en México, espectáculo al que asistieron los hijos del entonces presidente Ernesto Zedillo acompañados de sus guardaespaldas.
Casi al terminar el concierto y por razones de seguridad los guardias –soldados del Estado Mayor Presidencial- sacaron a los jóvenes por la parte trasera del escenario.
Pero el grupo tuvo un altercado con el equipo de U2. Versiones periodísticas de la época indican que los militares golpearon violentamente a Jerry Milly, jefe de seguridad de la banda quien quedó incapacitado para volver a trabajar.
Bono, el vocalista del grupo, se enojó tanto que sólo accedió a concluir las presentaciones pactadas después de hablar con el presidente Zedillo.
Pero durante ocho años el grupo no se presentó en México a pesar de las frecuentes invitaciones de empresarios y grupos de fanáticos.
El problema pareció terminar en febrero de 2006, cuando U2 regresó a escenarios mexicanos. Bono, y otros miembros de la banda, aseguraron en ese entonces que nunca se habían molestado con el país.
Terror a Madonna
La primera vez que se presentó en México, en noviembre de 1993, Madonna desató un intenso debate que llegó incluso hasta la Cámara de Diputados.
Su libro Sex, donde aparece desnuda y con textos de alto contenido sexual, se había publicado un año antes. La imagen de las páginas era la misma de sus conciertos lo cual inquietó a grupos conservadores del país.
En una carta enviada al entonces presidente Carlos Salinas los inconformes exigieron que se cancelara a la artista el permiso para actuar.
“Ya en otros países por la apología de vicios y desviaciones, han decidido no permitir la presentación del espectáculo”, señalaron.
Pero Madonna ofreció tres conciertos en la capital mexicana. Volvió al país 15 años después pero esa vez no hubo queja alguna.
El exorcismo a Marilyn Manson
En noviembre de 2003 algunos creyeron que el infierno caería en la ciudad de Monterrey, en el noreste del país, y para defenderse organizaron jornadas de oración y exorcismo en plazas públicas.
La razón del miedo fue la presentación de Marilyn Manson, a quien organizaciones católicas y de padres de familia llamaron “el Anticristo”.
Durante las semanas previas al concierto los grupos rezaron, caminaron por las calles del centro de la ciudad con ejemplares de la Biblia en las manos, amenazaron con impedir que el cantante de rock bajara de su avión y hasta prepararon varios litros de agua bendita para arrojarla en caso de emergencia.
Fue inútil. Manson ofreció su concierto sin problemas, y desde entonces ha vuelto varias veces al país sin causar miedo.
Cristina Saralegui y Laura Bozzo
Otra personalidad del espectáculo que despertó revuelo en México fue la presentadora cubano-estadounidense Cristina Saralegui, conductora de un programa de entrevistas donde se presentaban casos de violencia intrafamiliar o abusos sexuales.
Cuando en 1993 se anunció la transmisión del show por un canal local de Guadalajara, Jalisco, un grupo de mujeres vinculadas con el conservador Partido Acción Nacional (PAN) arrojaron aparatos de televisión a la fachada de la televisora.
Más recientemente, el año pasado, la peruana Laura Bozzo protagonizó un escándalo cuando utilizó un helicóptero del gobierno del Estado de México para viajar a la zona devastada por el huracán Manuel en la región montañosa de Guerrero, al sur del país.
La conductora fue acusada en redes sociales y algunos medios de usar recursos públicos para grabar su programa. La polémica llegó al nivel que algunos como el abogado Alejandro Vázquez Flores exigió suspender el proceso de naturalización de la peruana.
Vázquez acusó a la conductora de amenazarlo, pero ésta exigió pruebas. “Ya sé de donde viene, pero yo todo esto lo tomo como una broma de muy mal gusto”, dijo a medios locales.