Anunciadas con bombo y platillo el año pasado por el gobierno federal, las reformas de telecomunicaciones y la energética no pueden ser operativas en el país por falta de acuerdos entre partidos políticos.
El plazo legal establecido para que el Congreso discutiera y aprobara las leyes secundarias de la reforma de telecomunicaciones venció el 9 de diciembre pasado; mientras que para la legislación de la energética el límite fue el 20 de abril.
A la fecha, la discusión de ambas está atorada en Comisiones. En el caso de telecom, no se ha podido presentar un proyecto de dictamen que incluya las exigencias de todos los actores; mientras que para legislar sobre la apertura del sector energético los partidos políticos han condicionado la discusión.
[contextly_sidebar id=”11fd8652fab1f65b8388782bff98ac4c”]En el Senado, en Comisiones Unidas de Energía y Estudios Legislativos, Primera, este lunes 23 de junio se acabó el tiempo para concluir la discusión de los cuatro dictámenes necesarios para operar la reforma energética promulgada en diciembre pasado.
Si bien se declararon “suficientemente discutidos” los primeros dos dictámenes —que contenían la Ley de Hidrocarburos, la de Industria Eléctrica y Energía Geotérmica— el resto sigue pendiente desde el pasado 14 de junio, fecha en la que se suspendieron las reuniones de trabajo.
Los senadores de dichas comisiones votaron a principios de este mes que desahogarían la discusión energética entre el 10 y el 23 de junio y acordaron que en una fecha posterior votarían en bloque los dictámenes para pasarlos al pleno.
Según el Partido Acción Nacional (PAN), no existen condiciones para que ese partido regrese a la mesa de negociación que abandonaron el pasado 17 de junio, cuando acusaron al Partido Revolucionario Institucional (PRI) de no cumplir con lo acordado en materia político-electoral y amenazaron con no permitir avances en materia energética.
Además, ese partido continúa con diferencias internas para definir su postura sobre la legislación secundaria en materia de telecomunicaciones, que también está en suspenso.
El Partido de la Revolución Democrática (PRD), por su parte, asegura que todavía no hay acuerdos en materia de telecomunicaciones ni condiciones para establecer una fecha y calendario para su discusión.
Los perredistas también buscarán que se vuelva a discutir lo poco que se avanzó la semana pasada en el debate energético, pues solicitarán al presidente de la Comisión de Energía, el senador priista David Penchyna, que reabra la discusión en lo particular del primer dictamen y toda la discusión del segundo dictamen energético, las cuáles se llevaron a cabo durante el tiempo que los representantes de partidos de izquierda se levantaron de la mesa de negociación.
El miércoles pasado, Penchyna dijo en conferencia de prensa que si los integrantes de las Comisiones Unidas deseaban regresar al primero o al segundo dictamen, se abriría la puerta a un nuevo análisis y discusión.
Los legisladores buscan la forma de sacar adelante la legislación secundaria en materia energética y de telecomunicaciones en este verano y que estos pendientes no lleguen al periodo ordinario de sesiones que iniciaría en septiembre próximo.