El ABC de los cambios en la miscelánea fiscal
A pesar de la marcada oposición del Partido Acción Nacional, cuyos senadores abandonaron desde la madrugada del miércoles 30 de octubre la sesión del pleno donde se discutía la miscelánea fiscal para 2014, el Senado aprobó finalmente diversos cambios a la propuesta lanzada por el presidente Enrique Peña Nieto.
Luego de un receso que se prolongó durante 16 horas, senadores del PRI y del Partido Verde, en conjunto con una parte de la bancada del PRD, retomaron la discusión sobre impuestos que entrarán en vigor a partir del primer día del 2014.
[contextly_sidebar id=”98a920fff8dcbbecea3a30408a70fbbc”]Así que nuevamente, mientras la mayor parte de los mexicanos estaban en los brazos de Morfeo, la Cámara Alta dio su aval a buena parte de los cambios que previamente se aprobaron en la Cámara de Diputados en materia de impuestos, aunque optó por algunos cambios:
Desde la madrugada del miércoles los senadores del PRI, Partido Verde y PRD, avalaron -sin moverle una coma a lo aprobado por los Diputados- la minuta sobre la Ley del IVA. Así, finalmente se estableció una tasa de 16 % de IVA al transporte foráneo, a la venta de mascotas y su alimento, a los chicles, así como al comercio de bienes y servicios en las zonas fronterizas. Fue justo este último tema el que provocó que los senadores panistas abandonaran la discusión desde la madrugada del miércoles.
Al dejar intacta la propuesta de la Ley del IVA aprobada en la Cámara Baja, los senadores desecharon también la idea de gravar colegiaturas, espectáculos, así como la renta y venta de vivienda.
En materia de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) los senadores sí hicieron cambios. Decidieron que se aplicaría una tasa de 30% de ISR a las personas que tengan ingresos anuales por hasta 750 mil pesos anuales. Aquellos que ganen más de 750 mil pesos al año pero menos de un millón de pesos pagarán una tasa de 32%; mientras que para los que obtengan entre 1 y 3 millones de pesos la tasa de ISR será de 34%, y para aquellos que gocen de más de tres millones se aplicará un gravamen de 35% por ciento.
En materia de deducción de la prestaciones laborales, los senadores elevaron hasta 53% por ciento el monto que podrá ser deducible, en comparación con el 47% que habían aprobado los diputados.
También elevaron de 5% a 8% el gravamen especial que a partir del próximo año se impondrá a los alimentos “chatarra”, como pasteles, dulces, chocolates, natillas, helados, entre otros.
Aunque originalmente los senadores querían elevarlo hasta dos pesos, se mantuvo en un peso por litro el gravamen especial a los refrescos y bebidas saborizadas, así como a los concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores, que contengan cualquier tipo de azúcares añadidas.
Avalaron la modificación a la Ley Federal de Derechos que contempla un pago de derecho equivalente a 7.5% de las utilidades que obtengan las compañías mineras en México. Pero los senadores establecieron que el 50% de los recursos que se recauden por esta vía se destinará a municipios dependan esta industria. Así el 30% irá a los gobiernos estatales y el 20% restante a la Federación.
Aceptaron gravar con una tasa de 10% las ganancias obtenidas por adquisición de acciones en la Bolsa Mexicana de Valores.
Coincidieron en la desaparición del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU)y del Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE).
Ahora que ha sido aprobada la miscelánea fiscal, el Senado debe completar la discusión sobre la iniciativa de Ley de Ingresos, que ser votada a más tardar este mismo jueves 31 de octubre.
En tanto, el documento que contiene todos los cambios que hicieron los Senadores en materia de impuestos deberá ser devuelto a la Cámara de Diputados para su nueva revisión y aprobación, lo que se prevé ocurra también este 31 de octubre, aunque no hay un día límite para que concluya este trámite.
El miércoles, el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Fernando Aportela, sostuvo que las modificaciones hechas por el Congreso de la Unión a la propuesta original de Reforma Fiscal que planteó el presidente Enrique Peña Nieto no constituyen un fracaso de la iniciativa, pues ésta mantiene los elementos de progresividad y equidad que se plantearon desde el principio.
