El maquinista del tren que el pasado miércoles 24 de julio se descarriló a 4 kilómetros de la ciudad de Santiago Compostela y que ha provocado hasta ahora, la muerte de 78 personas, detenido la noche del jueves 25 de julio en el hospital donde se recuperan él y los demás heridos, se ha negado a rendir declaración ante los inspectores de la brigada judicial de la comisaría de Santiago de Compostela.
Francisco José Garzón Amo se encuentra custodiado por elementos policiacos, quienes ya preveían que el conductor del convoy adoptara esta actitud basándose en su derecho a no declarara, por el cargo de 78 homicidios imprudentes.
Los técnicos de la policía redujeron este viernes de 80 a 78 el número de muertos en el accidente, pero advirtieron que la cifra podría variar mientras continúa la identificación de los restos humanos.
[contextly_sidebar id=”6efd841c3c3a441590fbf5c4020ca20f”]Mientras tanto, los investigadores recuperaron las “cajas negras” del tren, que a elevada velocidad descarriló al tomar la curva A Grandeira. Las cajas contienen la velocidad, distancias y los frenados, de forma parecida a las que llevan los aviones.
Hasta el momento no se habían revisado puesto que se habían priorizado las labores de identificación de los fallecidos recuperados. No obstante, en el primer análisis de las transcripciones de las conversaciones entre el maquinista y la compañía, previas al accidente, se dio a conocer que el maquinista mismo reconoció que llevaba una velocidad de 190 kilómetros por hora cuando tenía que ir a 80.
El conductor, de 52 años, llevaba más de un año operando en esta misma línea y 30 como maquinista de Renfe. El presidente de la empresa ferroviaria, Julio Gómez-Pomar, declaró a medios españoles que Garzón Amo había pasado 60 veces por el punto donde se produjo el accidente, por lo que debía tener un conocimiento exhaustivo de la línea.
Llegan a España familiares de mexicana fallecida
Entre los 78 muertos del accidente se encontraba una veracruzana de 22 años, quien estaba en Santiago de Compostela en un intercambio para estudiar Derecho.
Sus familiares ya se encuentran en España, donde fueron recibidos por el embajador mexicano de aquel país, Francisco Ramírez Acuña, quien los estarán apoyando para de inmediato iniciar el proceso de repatriación del cadáver.
De acuerdo con la familia, la fallecida había concluido sus estudios y tenía previsto volver a México el próximo 2 de agosto.
El funeral por las víctimas tendrá lugar el próximo lunes a las siete de la tarde en la catedral de Santiago.
Con información de AP y El País.