El pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular la Estrategia Nacional de Energía 2013-2027, que el Ejecutivo federal puso a consideración del Congreso de la Unión.
Con una votación de 237 votos a favor, 125 en contra y 99 abstenciones, se avaló el dictamen que presentó la Comisión de Energía para su discusión ante el Pleno y el cual ya había sido validado por el Senado de la República.
Según el plan el gobierno federal tratará de aplicar los aumentos a las tarifas de los energéticos de manera gradual a fin de aportar para el desarrollo de infraestructura necesaria y eliminar los subsidios “indiscriminados”, por lo que se plantea revisar y afinar el esquema de precios para los siguientes años.
Uno de los argumentos de la Estrategia Nacional de Energía es que el sector debe ajustarse respecto al costo real de los energéticos, por lo que es inevitable que las tarifas al consumidor se incrementen.
En uno de los apartados del documento, se plantea que hay dos retos para el sector de la energía en México. Por un lado, el de la producción y el consumo, y por el otro, el del impacto a la canasta básica.
Además, propone revisar los subsidios a los combustibles dentro de una estrategia a 15 años que tiene como fin impulsar las mejoras que requiere el sector energía del país para fortalecerse, y la participación del sector privado en los hidrocarburos y la electricidad.
Aquí la Estrategia Nacional de Energía 2013-2027 íntegra: