El 27 de febrero pasado, la Secretaría de Gobernación (Segob) presentó una lista con más de 26 mil presuntos desaparecidos durante el sexenio de Felipe Calderón. Una lista, se informó entonces, elaborada por la administración anterior y que apenas “habría de depurarse en este gobierno”.
La dependencia presentó incluso un sitio web con la base de datos, que incluía en un mismo archivo a personas extraviadas (aquellas “que por circunstancias ajenas a su voluntad, desconoce o no recuerda sus datos de filiación, identidad y domicilio”), y personas desaparecidas (aquellas “que, con base en información fidedigna de familiares, personas cercanas o vinculadas a ella, la hayan dado por desaparecida de conformidad con el derecho interno, lo cual puede estar relacionado con un conflicto armado internacional o no internacional, una situación de violencia o disturbios de carácter interno, una catástrofe natural o cualquier situación que pudiera requerir la intervención de una autoridad pública competente”).
Sin embargo, el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Extraviadas sólo deja acceder a uno por uno de los casos y apenas permite tener información fragmentaria. En contraste, no abre la posibilidad de consultar la lista completa y no permite cruces, mapas ni análisis más profundos. Simplemente no puede consultarse la base de datos.
La página web del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Extraviadas está encargada al Secretariado del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) en la cual uno puede acceder sólo a ciertos resultados que coincidan con las búsquedas solicitadas y da información relativa a cada caso, por ejemplo, la fecha y la hora de la desaparición, el país de origen, la entidad federativa, el municipio y la localidad donde desaparecieron.
Aunque los nombres de las personas no aparecen en esta base de datos, se informa el género de la persona desaparecida, las señas particulares y tatuajes que pudieran mostrar y, finalmente, el Ministerio Público donde se denunció la desaparición.
Animal Político tuvo acceso, a través del investigador José Merino, a la base de datos completa, que hoy pone a disposición de sus lectores, la sociedad civil, organizaciones e investigadores que quieran revisar o cotejar esta información.
Intencionalmente eliminamos el nombre de los presuntos desaparecidos y las fotografías que, en algunos casos, los acompañaban para respetar la privacidad de las víctimas. El resto de la información está igual que como la difundió Gobernación.
Revisa en el siguiente link la base de datos de desaparecidos: http://t.co/euhUnKaoZN