Cuatro días después de la explosión en el edificio de Pemex de la capital mexicana que provocó la muerte de 37 personas y heridas a 121 más -veinte de las cuales aún están hospitalizadas, algunas de gravedad- la Procuraduría General de la República (PGR) reveló que la causa fue una explosión de gas.
De esta manera se busca acallar las especulaciones que, desde que ocurrió la explosión, el pasado jueves en la tarde en pleno corazón de Ciudad de México, han estado circulando por lo bajo en los medios y las redes sociales: si se trató o no de un atentado.
La explicación de las autoridades mexicanas deja varias respuestas y una gran pregunta, las cuales BBC Mundo les presenta a continuación.
QUÉ OCURRIÓ
Según el procurador general, Jesús Murillo Karam, en el edificio B2 del complejo de Pemex hubo una explosión difusa, lenta y definida, causada por la acumulación de un gas (posiblemente metano, aunque esto aún no se ha confirmado).
“La explosión fue por acumulación de gas que se combinó con una chispa del sistema eléctrico del edificio y provocó la tragedia”, indicó el procurador, ayudado de fotografías y mapas.
CÓMO SE LLEGÓ A ESTA CONCLUSIÓN
La clave fue el testimonio de un sobreviviente, contratista de una empresa privada y jefe de una cuadrilla de trabajo que se encontraba laborando en el edificio.
Según dijo, él y tres compañeros estaban trabajando en el sótano.
El testigo agregó que en un momento se desplazó hacia otro lugar, desde donde escuchó “un fuerte y corto silbido por el pasillo que provenía de las zona de pilotes que se estaba trabajando”.
Enseguida sintió un fuerte estallido “que lo impactó contra la pared”.
El viernes, al percatarse que sus compañeros no estaban en la lista de muertos ni en ningún hospital, contactó a las autoridades para dar la ubicación exacta de sus compañeros.
Sólo el sábado los equipos de rescate lograron hallar el primero de los tres cuerpos. Y era el primer muerto -de los más de treinta contabilizados hasta el momento- que presentaba quemaduras.
Además, tenía un fragmento de cable eléctrico pegado al cuerpo.
Horas más tarde encontraron los otros dos cuerpos. También presentaban quemaduras.
“La necropsia de estos tres trabajadores determinó que, aunque la causa de la muerte es un traumatismo cráneo encefálico, las quemaduras son producto de una explosión de gas”, aseveró el procurador general de México.
¿CUÁLES SON LAS RAZONES PARA DESCARTAR UNA BOMBA?
Según explicó el procurador, “cuando la explosión es producto de un artefacto explosivo, ésta deja un cráter y en este caso no lo hay”.
“Las vigas de acero en una explosión (de gas) no se fracturan, mientras en una explosión con artefactos explosivos, sí. Los cuerpos de las víctimas no presentan quemaduras” (sólo las tres que estaban cerca del lugar).
El estallido propició que la estructura de las losas de los pisos del edificio fuera impulsada hacia arriba y que después cayeran, lo que provocó lesiones por aplastamiento a la mayoría de las víctimas.
Además los cadáveres no presentan desmembramiento ni daños en oídos, característico de las detonaciones por artefacto explosivo.
Los expertos -de México, España y Reino Unido- determinaron que la explosión fue difusa. Es decir, lenta, horizontal y perfectamente definida, lo que es una característica de las explosiones de gas.
“En toda la estructura no hay elementos que presenten rastros de fuego, no hay un solo objeto quemado ni un papel”, declaró Murillo Karam, quien añadió que “de haber habido un artefacto explosivo, habría provocado la destrucción de todos los vidrios del complejo administrativo”.
Todos los todos los vidrios de las plantas superiores quedaron intactos.
¿HUBO NEGLIGENCIA?
Todo indica, entonces, que fue un accidente. Si es así, ¿por qué se acumuló el gas? ¿Hubo negligencia? Esa es la gran pregunta.
Supuestamente, Pemex y el sindicato (responsable de la seguridad de los trabajadores) deben llevar a cabo verificaciones mensuales de seguridad. ¿Se hicieron?
El procurador general de México indicó que, una vez que se concluya el resto de la investigación, se determinará si la filtración de gas se debió a una negligencia.
Sin embargo, así como a través de las redes sociales pululan los mensajes que ponen en duda la explicación gubernamental y se apegan a teorías de la conspiración, así también empiezan a surgir los que ponen en duda que algún día se castigue a los culpables, si es existen.