Reforma publica que la porosidad de un ducto que habría filtrado gas natural y el hallazgo de un regulador y un tubo que dieron positivo en gas metano son parte de las líneas de investigación más sólidas de la PGR sobre la explosión en el edificio B2 de Pemex, ocurrida el pasado 31 de enero.
Durante un recorrido por la zona siniestrada, el subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo de la PGR, Alfredo Castillo, dijo que es probable que la explosión se haya ocasionado por una mezcla de gases, tanto del subsuelo como de las tomas de abastecimiento.
En las últimas horas, especialistas e investigadores encontraron entre los escombros una llave y el pedazo de un tubo transmisor de gas metano, que no aparecen registrados en los planos del inmueble.
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