El gobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, anunció que con la muerte de Sergio Rafael Barraza y la captura de José Enrique Jiménez, se cierra el caso al resolverse los homicidios de Rubí Marisol Frayre Escobedo y de Marisela Escobedo Ortiz.
Expuso que “el compromiso del gobierno siempre ha sido de total apoyo y comprensión a las víctimas del delito, ya que en el caso del homicidio de Rubí Marisol, perpetrado en agosto de 2008, la Fiscalía General del Estado nunca dejó de buscar al responsable de este delito”.
El mandatario estatal dijo que para la lograr la captura de Sergio Barraza, e incluso, en mancuerna con el gobierno federal, ofreció una recompensa de cinco millones de pesos por la información que llevara a su localización.
Explicó que mediante “un intenso trabajo de inteligencia y de investigación de campo, la Policía Estatal detuvo a José Enrique Jiménez Zavala, autor material de la muerte de Marisela Escobedo“.
Recordó que “el mismo acusado declaró que el asesinato de Marisela fue en compromiso de un acuerdo entre el grupo La Línea con los Zetas, la organización delictiva a la que, ahora se confirma, perteneció el homicida de Rubí, Sergio Barraza”.
Informó que el asesino de Escobedo ya fue vinculado a proceso, el pasado mes de octubre. Se encuentra recluido en el penal estatal de Chihuahua por este crimen y otros más, incluyendo el multihomicidio en el Bar El Colorado, registrado el 20 de abril.
“Con la muerte de Barraza Bocanegra en Zacatecas, se cierra un doloroso capítulo que vivimos los chihuahuenses, y es el inicio de que se vaya sanando esa profunda herida que nos dejaron las muertes de Rubí y de Marisela”, indicó Duarte Jáquez.
El caso
Ayer se dio a conocer que Barraza Bocanegra, presunto asesino de la hija de Marisela Escobedo, fue abatido por elementos del Ejército en Zacatecas.
En enero de 2011, los jueces que fueron señalados por absolver a Barraza Bocanegra aseguraron que el joven jamás se declaró culpable y que lo liberaron porque no tenían pruebas “válidas y contundentes”.
Un mes despúes, la notificación de juicio político contra los jueces Catalina Ochoa Contreras, Netzahualcóyotl Zúñiga Vázquez y Rafael Boudib Jurado, que presuntamente dejaron libre al asesino confeso de Marisol Frayre, quedó pendiente debido a que ninguno fue localizado.
Por otra parte, cuando presentaron al presunto asesino de Marisela Escobedo, conocido como “El Wicked”, la abogada de la activista fallecida puso en duda la versión de la Fiscalía del estado, quien antes ya había identificado a otros dos hombres como presuntos asesinos de Escobedo.
Marisela Escobedo fue asesinada el 16 de diciembre de 2010 mientras se manifestaba frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua por el asesinato de su hija Rubí Marisol Frayre Escobedo, sucedido en 2008.
Un par de meses después, en diciembre de 2010, el cuñado de Marisela Escobedo, Manuel Monge Amparán, fue secuestrado y asesinado por un comando armado en Chihuahua.
Casi a finales de dicho mes, los hijos y una sobrina de la activista huyeron de México para refugiarse en El Paso, Texas, después de haber recibido múltiples amenazas de muerte.
Con información de Notimex.