Una llamada telefónica en la que una persona anónima acusó al general de División en retiro Tomás Ángeles Dauahare de haber presionado a sus alumnos, cuando fue titular del H. Colegio Militar, para que supuestamente consumieran y vendieran drogas, permitió a la Procuraduría General de la República (PGR) ampliar otros 40 días el arraigo en contra del militar, sujeto a una investigación por sus presuntos vínculos con el crimen organizado, revelaron fuentes ministeriales.
Luis Núñez Sandoval, juez federal en medidas cautelares, autorizó que el general Ángeles, así como el general Brigader Roberto Dawe González, permanezcan arraigados del 25 de junio, fecha en la que fenecen los primeros 40 días de retención, al 3 de agosto próximo, lapso en el que los fiscales deberán concluir la averiguación abierta en su contra. Es inaceptable que ante la falta de pruebas contundentes la PGR se ponga a darle validez a denuncias anónimas que cualquiera puede hacer. ¿Como podemos certificar que sea una llamada real? Eso nunca lo sabremos
, cuestionó el penalista Ricardo Sánchez Reyes Retana, abogado defensor del general Ángeles.
En esa llamada, según refiere la indagatoria UEIDCS/112/2010, una voz masculina dijo tener conocimiento de que Ángeles Dauahare, ex subsecretario de la Defensa Nacional y ex director del Heroico Colegio Militar, amenazaba a sus alumnos con expulsarlos de la institución o procesarlos por delitos contra la salud si no consumían y/o vendían drogas en el plantel militar. Reyes Retana indicó ayer en entrevista con La Jornada que cada vez queda más demostrado que las pruebas que hasta el momento ha recabado son insuficientes para sustentar un proceso penal contra el general.
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