La Procuraduría General de Justicia en Michoacán (PGJE) desistió de las acusaciones contra diez estudiantes que estaban presos en un penal de alta seguridad en Morelia por supuestamente ser responsables de incendiar tres vehículos oficiales, por lo que los liberaron esta tarde.
El vocero de la dependencia, Jonathan Arredondo, dijo que esta decisión “se hace a petición del gobernador del estado, Fausto Vallejo Figueroa”.
Estos diez estudiantes de la Universidad Michoacana y moradores de las casas estudiantiles 2 de octubre y Nicolaíta estuvieron presos desde el 6 de mayo, acusados de daños a propiedad privada y asociación delictuosa.
Por su parte, el grupo Sociedad de Ex alumnos Nicolaítas se comprometió a pagar los daños materiales ocasionados al ayuntamiento de Morelia y al gobierno de Michoacán. Según El Universal, Arredondo dijo que los daños podrían ascender a casi un millón de pesos.
Además, “(los estudiantes) acuerdan y se comprometen para beneficio de la sociedad moreliana en no realizar, a partir de ahora, bloqueos de calles para impedir el libre tránsito por las calles de la ciudad, ni el secuestro de vehículos sean estos oficiales o particulares, como medida de presión”, expresaron las autoridades.
El “Compromiso Social por Morelia”, firmado por el gobierno y los estudiantes, estipula que los jóvenes siguen teniendo el derecho a la libre manifestación –marchas, mítines, caravanas…-, pero tendrán que hacerlo de manera pacífica.
Con información de El Universal y Reforma.