La mañana del 4 de marzo de 2011, unas 15 mil personas corearon el nombre de Humberto Moreira en la explanada del Centro de Convenciones de la ciudad de Querétaro. En ese entonces, el nombre del ex gobernador coahuilense remitía a los priistas a la unidad, pues tomaba protesta como presidente del partido una figura respaldada por todo el tricolor.
El sentimiento de unidad que generaba Moreira duró menos de 270 días. El 2 de diciembre de ese mismo año, oficializó su renuncia al PRI en medio de señalamientos por la falsificación de documentos para que el Gobierno de Coahuila contratara una deuda millonaria.
Aquel 4 de marzo los convocados a la toma de protesta disfrutaron de un evento en el que, según versiones oficiales, se gastaron 3 millones de pesos. Los presentes vieron los espectáculos musicales de la Sonora de Margarita y del grupo norteño ‘Pesado’. También, del show cómico de Adrián Uribe.
Luces, cámaras aéreas, pantallas gigantes y escenarios especiales para televisión permitieron que los 15 mil asistentes siguieran el acto a detalle. El priismo no escatimó en aquel evento del que hoy, a más de un año de ocurrido, es imposible conocer cuánto dinero público gastó.
Las versiones oficiales reportadas por el propio tricolor en aquella fecha afirmaban que con los 3 millones de pesos se cubrieron, entre otros gastos, reservaciones de hoteles y la renta del Centro de Convenciones.
Para corroborar la información otorgada en aquella ocasión por el PRI, Animal Político remitió al Instituto Federal Electoral (IFE) una solicitud de información a la que se otorgó el folio UE/12/01193. Enviada el 2 de marzo de este año, la solicitud pedía copias simples de los documentos que avalaran la contratación y el pago de bienes y servicios para aquel evento.
El día 26 de marzo, Animal Político recibió una notificación de ampliación de plazo para tener respuesta. En esa fecha se cumplieron los 15 días de rigor que la ley estipula para responder o ampliar los días para contestar. Sin embargo, ese mismo día también venció el plazo que los partidos tienen para presentar ante el IFE el reporte de gastos del último año.
La respuesta definitiva fue notificada el pasado 18 de abril. En el documento, la Comisión de Información del IFE asegura que resolvió la solicitud el día 2 de marzo, por lo que a la fecha, la información era inexistente. Posteriormente afirma que en atención al principio de máxima publicidad y exhaustividad, turnó la solicitud al Partido Revolucionario Institucional el día 12 de marzo.
Once días después, el PRI negó el acceso a los datos solicitados
“Le informo que dicha información se encuentra en reserva, toda vez que corresponde al Informe Anual del Ejercicio 2011 y que se encuentra en proceso de revisión y auditoría”, dice el documento.
La respuesta agrega también que los informes anuales de los partidos son públicos hasta que el Consejo General del IFE los haya aprobado. Lo anterior, según el artículo 64 fracción décima del Instituto Federal Electoral.
Según lo estipulado por la Comisión de Información, será hasta el 18 de septiembre de este año cuando el procedimiento de fiscalización haya finalizado. Es decir que después de que de que el PRI ‘echase la casa por la ventanta’ en la toma de protesta de un Presidente de partido que duró apenas nueve meses en el cargo, la espera para conocer el gasto total de aquel evento es de poco más de un año y medio.