En meses recientes se ha registrado un número crecientes de asesinatos contra taxistas en municipios del estado de Nuevo León y el puerto de Acapulco, en Guerrero, la mayoría de esas muertes son atribuidas al crimen organizado.
¿Pero, por qué el crimen organizado atenta contra los taxistas? El colectivo de periodistas especializados en seguridad InSight Crime presenta algunas posibles respuestas a esa interrogante que surge tras el asesinato de ocho taxistas en Nuevo León.
Sobre los asesinatos en Nuevo León, la agencia dice que la autoría apunta al cártel de Los Zetas, que en los últimos años ha diversificado sus actividades ilícitas ingresando al “negocio” los taxis piratas, situación que explicaría la violencia contra estos trabajadores.
Además, los taxistas son contratados como vigilantes o “halcones” para informar a los cárteles sobre las actividades de la policía, el Ejército e incluso la los grupos rivales. Informes policiales apuntan a que los taxistas recién asesinados trabajaban como vigilantes para Los Zetas.
Los trabajadores del volante también son utilizados para facilitar las ventas al menudeo de drogas, InSight Crime relata que existen versiones de que en Nuevo León, un taxista fue despedido por vender drogas y que amenazó con la venganza de Los Zetas a sus ex compañeros.
Sea cual sea el motivo del crimen, destaca la agencia, no es la primera vez que los trabajadores del transporte han sido blanco de grupos del crimen organizado en México y, de hecho, este ha crecido cada vez más
El mismo día de los asesinatos en el municipio de Guadalupe, cinco taxistas fueron asesinados en el sur de la ciudad turística de Acapulco. En febrero, cinco taxistas en Monterrey fueron muertos a tiros mientras charlaban a la espera de las tarifas fuera de una tienda de muebles. El año pasado, decenas de taxistas fueron asesinados en Acapulco, presuntamente a manos de integrantes del crimen organizado.