El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, habló por teléfono ayer por la noche con Florence Cassez, para asegurarle que las autoridades francesas seguirán proporcionándole toda la asistencia permitida por la ley para lograr su liberación.
Además de compartir con ella “la decepción de no obtener una liberación inmediata”, el jefe del Estado francés animó a Cassez a mantener el optimismo, pues “cuatro de los cinco jueces de la a Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia estimaron que sus derechos constitucionales habían sido violados”, informó un portavoz de la Presidencia francesa.
A pesar que la Primera Sala terminó rechazando la propuesta de anular la sentencia impuesta a Cassez, sí se estableció que hubo violaciones graves en el proceso que le había condenado a 60 años de cárcel, por lo que el caso volverá a ser examinado y serán tomadas en cuenta todas las irregularidades, entre ellas la falta de una “asistencia consular efectiva” y el falso montaje televisivo que se llevó a cabo.
Con información de Le Figaro.