La Jornada publica que dos unidades de contingencias ambientales de la Comisión Estatal de Agua y Medio Ambiente (Ceama) se apostaron en la entrada del relleno sanitario municipal de Cuatla para impedir el ingreso de mil 200 toneladas de basura de la ciudad de México. En caso de desobediencia los encargados de ese tiradero y el ayuntamiento se harán acreedores a una multa o hasta la clausura, reconoció Ángel González Pérez, uno de los encargados.
La instalación de las dos unidades verificadoras ocurrió a partir del medio día, 24 horas después de que la Ceama apercibió al ayuntamiento de Cuautla para que no continuara recibiendo mil 200 toneladas de basura diarias del Distrito Federal, como hizo desde el pasado 16 de diciembre.
En ese documento, que fue entregado el miércoles al alcalde de Cuautla, Felipe Güemes Ríos, se especifica que a partir de la notificación deberá abstenerse de recibir cualquier residuo proveniente de esa entidad para su derrame, depósito, confinamiento, almacenamiento, incineración o cualquier tratamiento para su destrucción o disposición final en el relleno de referencia.
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