Alrededor del mediodía de hoy se dio a conocer que Nepomuceno Moreno Nuñez, integrante del #MovimientoporlaPaz, fue asesinado de siete balazos, en el crucero de la calle Reforma y Pesqueira de la colonia Centenario, en Hermosillo, Sonora.
Nepomuceno Moreno participó en los Diálogos por la Paz con el presidente Felipe Calderón en el Castillo de Chapultepec, donde denunció la detención ilegal y desaparición forzada que sufrió su hijo Jorge Mario.
Aquí un video donde narra lo acontecido con su hijo:
Moreno Nuñez tenía 56 años y su cuerpo fue encontrado dentro de una camioneta modelo Silverado en la que viajaba; según testigos, el auto en el que viajaba el activista transitaba por la calle Pesqueira y al doblar por Reforma le alcanzó otro vehículo, desde el cual le dispararon.
Elementos de corporaciones estatales y municipales ya buscan a los agresores.
Por su parte, el exombudsman capitalino y vocero del Movimiento por la Paz, Emilio Álvarez Icaza, dio a conocer que se analiza la posibilidad de sacar del país a la familia de Nepomuceno Moreno.
Esta tarde se planea una concentración frente a oficina del estado de Sonora en el DF, en la calle Goldsmith, entre Homero y Ejército Nacional, en Polanco, para protestar por este asesinato.
El tema ya se mueve en la red con el hashtag #Nepomuceno.
El caso de Jorge Mario Moreno
Nepomuceno Moreno llegó a señalar que “estaba resignado a pelear solito contra el gobierno de Sonora, ya ni me quieren recibir, se ríen de mí, antes iba al cuartel del Ejército para denunciar el secuestro de mi hijo, escribía cartas a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) y nadie me hacía caso; hasta que me uní al Movimiento por la Paz veo que las organizaciones sociales tienen el poder para sentar al presidente Calderón en una mesa de diálogo y que los procuradores de Justicia están obligados a recibirnos para reabrir las investigaciones.”
El primero de julio de 2010, Jorge Mario fue con tres amigos desde Hermosillo (Sonora) a Ciudad Obregón, y antes de llegar a su hotel, la policía los interceptó con armas de grueso calibre, así que salieron huyendo, todos los vehículos pasaron por la caseta de cobro y los uniformados les comenzaron a disparar, mi hijo pidió ayuda al número 066 –servicio telefónico de la policía- y les contestaron, pero no recibieron respuesta, nadie los ayudó, era una cosa planeada por los policías, los uniformados corretearon a mi hijo y a su amigo, ambos salieron del automóvil para correr por sus vidas –su amigo se salvó y ahora vive exiliado en Estados Unidos-, mi hijo caminó 20 kilómetros hasta llegar a una tienda Oxxo, desde ahí nos habló por teléfono para decirnos “que había tenido problemas, que lo perseguía la policía y que les iban disparando”, yo le dije que no se moviera de la tienda, que buscaría a un amigo para que fuera a buscarlo desde Guaymas, porque está más cerca de Ciudad Obregón que de Hermosillo. Mientras mi hijo Mario hablaba por teléfono dijo: “ya vienen los policías por mí, con las pistolas en la mano”, lo sometieron y esposaron para sacarlo de la tienda Oxxo en una camioneta blanca”, relató Moreno.